Condenan a una mujer a un año de cárcel por amenazar a una amiga tras grabar su infidelidad
A CORUÑA CIUDAD
Una infidelidad de una vecina de Monforte con un hombre que había conocido en Internet ha concluido con la condena de un año de cárcel a M. P. V., supuesta amiga de la mujer y a quien la magistrada del Juzgado de lo Penal número 4 de A Coruña considera responsable de la grabación que se realizó del encuentro extramatrimonial y con la que se intentó extorsionarla.
La víctima se había citado con el hombre en agosto del 2003 en A Coruña y las grabaciones se realizaron en varios puntos de la ciudad, entre ellos una marisquería, el aparcamiento de un centro comercial y la estación de tren, itinerario que conocía la acusada, ya que, junto con otra amiga que trabajaba esos días en Monforte, era la única persona que sabía que se iba a producir el encuentro.
Cuatro días después del viaje, la mujer recibió una llamada a su móvil y una mujer le explicó que era de una agencia de investigación contratada por la familia de su marido, que tenía una grabación de su cita, y le exigió 1,2 millones de pesetas para no enviársela a su esposo. Días más tarde recibió la cinta, y poco después, según el fallo, varios SMS advirtiéndola de que había «una segunda grabación y que, si la quería comprar, le costaría 600.000 pesetas». A este mensaje le siguieron otros preguntándole si quería adquirir la cinta, rechazando que fuera un chantaje, apenándose por que se hubiera enterado su marido y diciéndole que le revelaría quién encargó el vídeo. «No tengo conciencia, todo lo más te enviaré una corona con lo que cobre por este trabajo», rezaba uno de los textos que recibió.
Indemnización
La víctima optó por denunciar los hechos el 18 de septiembre y tras ser imputadas en un primer momento cuatro personas por estos hechos, tanto la acusación particular, ejercida por el despacho de Víctor Espinosa, como el fiscal optaron por culpar de la autoría de los hechos solo a M. P. V. La acusada ha sido sentenciada además a abonar a su antigua amiga 20.000 euros en concepto de daños psicológicos y morales.