Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

Salvamento perdió al guardia civil al cortarse el cable del «Helimer»

Luís A. Núñez

GALICIA

El cadáver fue recuperado pasadas las diez de la mañana, tras una exhaustiva búsqueda nocturna

25 feb 2008 . Actualizado a las 02:42 h.

Tras una noche de intensa búsqueda, finalmente fue la embarcación Salvamar Shaula la que avistó el cuerpo ya sin vida de Ramón González Cabaleiro, el guardia civil de 39 años que desapareció en aguas de la playa ferrolana de San Xurxo en torno a las 21.30 horas del día anterior, mientras participaba en la búsqueda de un supuesto ahogado. A las 10.15 se fijó la hora oficial en la que el cadáver del agente del Servicio Marítimo Provincial del instituto armado fue sacado del agua.

La tragedia se desencadenó pasadas las siete de la tarde del sábado. Una persona alertó al Cuerpo Nacional de Policía de que había avistado algo que parecía un cuerpo flotando. Casi una hora después, la playa era un ir y venir de equipos de rescate entre las puntas Herbosa y Branca, que delimitan los arenales de San Xurxo y Esmelle.

A las 20.50 horas llegó a la zona de búsqueda la patrullera de la Guardia Civil Alcázar 10. Ante las dificultades para acercar la embarcación al acantilado, dos agentes lanzaron una balsa tipo zódiac al agua y salieron a explorar el lugar en donde se sospechaba que pudiera estar el supuesto ahogado.

Hacia las 21.30 horas, y cuando ya se iban a posponer las labores de búsqueda para la mañana siguiente por falta de luz, un golpe de mar desplazó la embarcación neumática e hizo que González Cabaleiro cayese al agua. Mientras, según la versión de la Guardia Civil, su compañero trataba de estabilizar la balsa para acercarse al agente caído al agua. Entonces, una segunda ola hizo volcar la embarcación a unos 150 metros de la orilla de la playa.

En tierra había ya un importante despliegue de Protección Civil de Ferrol. Algunos escucharon los gritos de los guardias civiles y vieron cómo destellaban las antorchas de emergencia de sendos chalecos salvavidas. «Uno de ellos se dirigía hacia la orilla, y el otro iba directo hacia las rocas», relataron ayer al respecto. El segundo era el fallecido.

En el lugar se encontraba el helicóptero del servicio de Salvamento Marítimo con base en A Coruña, el Helimer. Este localizó a Ramón González a los pocos minutos del suceso. Uno de los rescatadores descendió con el cable de la grúa para sacar al agente del agua y se encontró, según manifestaron fuentes de Salvamento, con el cuerpo flotando cabeza abajo ya sin vida.

En este punto, la versión de la Guardia Civil es que el agente estaba vivo entonces, aunque desde Protección Civil consideraron que las luces de su chaleco se movían con la corriente (que es muy fuerte en esa zona, junto a las rocas) como si se tratase de un cuerpo inerte.

Cayeron al vacío

Mientras el rescatador estaba izando a Ramón González al helicóptero, el cable se cortó por causas por el momento desconocidas. Ambos cayeron de nuevo al vacío y fue entonces cuando se le perdió la pista al guardia civil.

Por su parte, el instituto armado anunció una investigación para esclarecer las causas del suceso, si bien una grúa de las características de la del Helimer tiene capacidad para levantar un peso superior a los doscientos kilos.

En cualquier caso, las condiciones del rescate no eran todo lo buenas que cabía esperar. Había fuertes rachas de viento, el mar estaba considerablemente picado con olas de hasta tres metros, y la proximidad del acantilado podría poner en peligro la operación con el helicóptero estático.