Los terrenos que ocupó la multinacional alemana Brenntag en el municipio pontevedrés de Caldas siguen filtrando, a través del subsuelo, sustancias químicas al río Umia. El partido Independentes de Caldas de Reis (ICdR) alertó ayer de la situación de la parcela y aportó varias fotografías en las que se aprecia un anormal color azul en el cauce.
El concejal Fernando Pérez hizo hincapié en que el río transcurre unos seis metros por debajo de la cota del solar ubicado en As Veigas de Almorzar, «co cal o problema de filtracións se agrava».
Esta formación política ya expresó hace unos meses su preocupación por el estado del terreno que ocupó la factoría hasta el incendio registrado el 1 de septiembre del 2006, que se originó durante la descarga de un camión cisterna lleno de tolueno y provocó un vertido tóxico al Umia. El pasado junio, la Consellería de Medio Ambiente desveló que la empresa tuvo que presentar un segundo plan de recuperación del suelo de la parcela y que es una de las 12.000 firmas afectadas en Galicia por el decreto de suelos contaminados. La intención de Brenntag es vender la parcela, de 13.000 metros.
La Administración gallega no es ajena a las filtraciones al cauce que se producen en ese punto. Un informe hecho público recientemente, al cumplirse el segundo aniversario del incendio, concluye que la recuperación de las aguas superficiales es absoluta. Sin embargo, respecto a las aguas subterráneas, falta por determinar todavía el riesgo ambiental para la salud humana derivado de la presencia de varios componentes detectados.