Si se cambiara el césped por arena, el San Pepe que celebraron los informáticos coruñeses el pasado miércoles bien podría parecerse al San Juan que se festeja en esta ciudad cada 24 de junio. Más de 5.000 jóvenes tomaron el campus de Elviña (incluidas varias aulas de la facultad) para festejar por todo lo alto la fiesta en honor a su patrón.
Pero, después de tanto festejo, llegaron las consecuencias, y el campus amaneció inundado de kilos y kilos de basura, compuesta principalmente por bolsas de supermercados, cartones de vino, botellas y vasos de plástico y cristal, restos de comida y hasta zapatos y cucharas. Las huellas de este macrobotellón eran visibles metros antes de la entrada al campus universitario, y llegaban a todas las facultades.
Una cuadrilla formada por una quincena de personas se encargó ayer, desde las ocho de la mañana, de retirar la tonelada y media de desperdicios que llenaron más de 200 bolsas grandes de basura. Muchos trabajadores se mostraban sorprendidos por la magnitud de la celebración, «que fue mucho mayor que la del año anterior. Cuando llegamos, no se veía el suelo donde estaba instalada la carpa. Era todo basura», explicó uno de los operarios, que regresarán hoy a continuar con la limpieza.
Desde el rectorado, José María Barja afirmó ayer que la celebración del macrobotellón «non é unha situación satisfactoria, pero é un problema da sociedade, que vén de moi atrás. A Universidade non o pode solucionar soa. Que nos digan como facelo, e o faremos». Sobre la prohibición de celebrar el San Pepe que hubo en Vigo, Barja reconoció que no le gustan esas decisiones extremas, y afirmó que aquí no se produjo ningún incidente y allí sí.
Centenares de bolsas
En Vigo, el resultado fue muy similar: se retiraron en torno a tres toneladas del entorno de la plaza de Miralles, según las primeras estimaciones. Los servicios municipales de limpieza reunieron un centenar de bolsas en los contenedores de la plaza. Los restos procedían de los cascos de botellas de las bebidas alcohólicas que ingirieron miles de estudiantes hasta altas horas de la madrugada de ayer.