Las centrales STEG y CIG emprenden acciones judiciales ante el Tribunal Superior de Xustiza
16 jun 2009 . Actualizado a las 02:37 h.La consulta a los padres sobre el gallego ha logrado unir en su contra a profesores, sindicatos, equipos de normalización y colectivos pedagógicos. Uno de los grupos más afectados es el de los directores de colegios e institutos, que deben gestionar y garantizar todo el proceso. De ahí que no solo cuestionen el objetivo y la finalidad de la encuesta, sino el propio procedimiento.
Ayer se celebraron sendas reuniones de directores en Santiago y Pontevedra. En total, acudieron en torno a medio centenar de responsables de centros. Los profesores se preguntan qué validez tiene recoger la opinión de los padres cuyos hijos terminan la enseñanza, por ejemplo, y obviar la de los que van a iniciar el curso a partir de septiembre. Otra crítica se refiere al intento de «sacar do Parlamento o que ten que lexislarse no Parlamento». En cuanto al correo electrónico enviado por la consellería para prohibir actos a favor o en contra de la consulta, «xa é que nin o valoramos». Uno de los directores que acudió a la reunión de Compostela se preguntaba ayer cómo es posible gastar más de 200.000 euros en esta medida, «cando cada vez que se fala dunha necesidade educativa, o conselleiro di que non hai cartos».
Los centros de infantil y primaria de la ciudad de Pontevedra también pusieron sobre la mesa la primera protesta contra la encuesta. Aseguran que la decisión de la consellería está provocando el enfrentamiento entre los profesores, además de aumentar la carga de trabajo de los grupos directivos en un momento crucial del curso. El colectivo se reunió para, de manera conjunta, mostrar su descontento con esta iniciativa, que consideran que no solo se tomó de manera precipitada, sino que «no se tiene en cuenta al profesorado como miembro fundamental de la comunidad educativa». En el documento firmado por la dirección de 17 de los 23 centros que hay en la ciudad señalan: «O procedemento habilitado para a devolución das enquisas produce en nós unha sensación de servilismo propio doutras épocas».
Las reuniones de equipos directivos, que comenzaron ya hace días, continuarán. El sábado pasado más de un centenar de representantes llevaron a cabo una asamblea para rechazar el intento de censura «e prohibición da liberdade de expresión e de cátedra do profesorado por parte da consellería», pulsar la opinión de los directivos sobre la posibilidad de dimitir por esta imposición, o promover concentraciones el día 22, coincidiendo con la entrega de las encuestas.
Las reuniones y escritos no son la única medida de protesta en contra de la consulta. La CIG-Ensino acaba de presentar un recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia por la vulneración de derechos como la libertad de expresión y sindical, en relación al comunicado de la Xunta en el que se prohíben actos a favor o en contra de la encuesta. Además, el sindicato también interpuso una denuncia en la Agencia Española de Protección de Datos, «polo uso fraudulento dos ficheiros de xestión académica».
Estos recursos se unen al que presentó la misma organización hace una semana en la consellería, y al que acaba de anunciar el sindicato STEG, también judicial, contra el comunicado de la Xunta que insta a los directores a prohibir actividades sobre la consulta.