Regístrate gratis y recibe en tu correo las principales noticias del día

Sogama paraliza el plan para incinerar medicamentos de toda España

La Voz

GALICIA

La dirección y el comité de empresa no logran cerrar un acuerdo para gestionar los residuos farmacéuticos

14 nov 2009 . Actualizado a las 02:00 h.

El alcalde de Cerceda, José García Liñares, convocó a última hora de la mañana de ayer un pleno extraordinario para hoy mismo. El único punto en la orden del día: «Acuerdo contra el cierre de la planta de Sigre [sistema integrado de gestión y recogida de envases promovido por el sector farmacéutico español]». Nueve palabras que hicieron saltar todas las alarmas entre la veintena de trabajadores de Danigal, empresa que se encarga de esta tarea en las instalaciones del polígono de O Acevedo. Gestiona casi 3.000 toneladas anuales de medicamentos que llegan a una planta única en Europa, procedentes de los más de 20.400 puntos autorizados instalados en farmacias de toda España.

Según los empleados de Danigal, el volumen de trabajo no ha hecho sino aumentar en los últimos meses, pero, sin embargo, su futuro pinta muy negro. La razón: la negativa del comité de empresa de Sogama a que los restos no reciclables de los medicamentos se incineren en la planta termoeléctrica de la sociedad. Esto tendría que estar haciéndose desde la apertura de Sigre, en abril del 2003, pero, en realidad, los restos se depositaban en el vertedero de Areosa, lo que dio lugar a una fuerte polémica política en las últimas elecciones autonómicas.

Las primeras toneladas de medicamentos (400 en total) llegaron a las calderas de Sogama el pasado verano, cuando quedó certificado que los restos de medicinas que se recogen en las farmacias pueden considerarse residuos urbanos. Sin embargo, la incineración se paralizó cuando el comité de empresa de la Sogama reclamó mayores medidas de seguridad y la garantía de que esta labor no iba a perjudicar la salud de los operarios encargados del tratamiento.

Fue entonces cuando comenzó una larga serie de negociaciones y desencuentros entre los trabajadores y la dirección de Sogama. Tanto la Inspección de Trabajo como el Instituto Galego de Seguridade e Saúde certificaron, a petición del comité de empresa, que la planta de Cerceda reunía las condiciones para la quema de medicinas y que los empleados no corrían peligro alguno.

Plasencia y Madrid

«Parecía que todo estaba claro, que ya no habría ningún problema, pero el jueves, después de que los técnicos les explicasen cómo iba a ser el procedimiento, los miembros del comité de empresa se negaron a firmar el acta de la reunión y a reconocer de forma oficial que están de acuerdo en reiniciar el proceso», explicó ayer el presidente de Sogama, Luis Lamas, quien admite que Sigre ya ha empezado a mandar residuos a incineradoras de Plasencia y Madrid.

«Si Sogama no se encarga de los medicamentos, la planta de Sigre en Cerceda no tiene ningún sentido», augura Lamas, quien insiste en que la compañía pública no se hará cargo de los restos sin el acuerdo de sus empleados. «No es de recibo que a nivel interno estén de acuerdo, sobre lo que incluso hay un vídeo, pero -reprobó- se nieguen a hacerlo oficial».

La versión del comité de empresa es muy diferente. Su presidente, Miguel Ángel Rico Bestilleiro, de CIG, aseguró que la única exigencia de los trabajadores es «que se cumpran as normas de seguridade en todo momento», y añadió que el comité no tiene que firmar ningún documento, porque la decisión o no de incinerar los medicamentos «é exclusiva da dirección de Sogama, como é decisión súa tratar uns residuos ou outros». «Levo nove anos na empresa e xamais tivemos que firmar nada para que entrase o lixo», añadió Rico Bestilleiro, quien insistió en que el comité tampoco desea el cierre de la planta de Sigre. «Son os nosos veciños», refrendó.? La situación se ha enquistado hasta tal punto que una de las vocales del comité de empresa de Danigal, también de CIG, decidió presentar ayer su dimisión. Belén Lois Loureiro argumenta que la firma «está abocada ao peche pola falta de entendemento entre Sogama e o seu comité, e nin o sindicato nin o seu asesor directo, tamén asesor de Sogama, están a apoiar aos traballadores que representan».