Navia de Suarna vuelve a estar amenazada por la construcción de un embalse

Benigno Lázare

GALICIA

Presentado el proyecto de una presa de cien metros de altura para almacenar 113 hectómetros cúbicos

09 abr 2010 . Actualizado a las 02:05 h.

Pocos años después de terminar la Guerra Civil, los primeros Gobiernos franquistas otorgaron una concesión para la construcción de un embalse en el río Navia que cayó como una losa en esa zona de Os Ancares. La presa dejaba la parte baja del municipio de Navia de Suarna sumergida en las aguas, incluida la villa, que conserva un núcleo histórico interesante, una fortaleza alterada arquitectónicamente y un puente medieval que es el símbolo de la localidad.

La concesión inicial experimentó varias modificaciones legales, pero la que contemplaba el denominado Gran Suarna data de 1963. Casi medio siglo después las empresas eléctricas que se fueron sucediendo en la titularidad de la concesión siguen presentando proyectos para mantenerla viva. La pasada semana el Boletín Oficial de la Provincia de Lugo publicó el proyecto de estudio de impacto ambiental que incluye varias modificaciones.

La amenaza de un embalse de grandes dimensiones paralizó en la segunda mitad del siglo pasado las ventas de tierras y de edificaciones, así como la creación de nuevos negocios en una época en la que la despoblación de las zonas rurales aún no era letal. La previsión del Gran Suarna colaboró de forma determinante a acelerar la decadencia demográfica y económica de ese municipio lucense.

El proyecto generó un gran rechazo social y la población se movilizó de forma organizada. Las protestas paralizaron el embalse, pero ni las manifestaciones ni las iniciativas legales consiguieron extinguir definitivamente la amenaza.

La concesión del aprovechamiento hidráulico se mantuvo como brasa en medio de una tormenta. El año pasado el fuego se reavivó, ahora bajo la denominación Saltos del Navia, C.?B., empresa integrada por Hidroeléctrica del Cantábrico, S.?A., y Endesa Generación, S.?A., que es la titular del permiso administrativo.

Cambio de planes

La construcción del Gran Suarna quedó descartada porque ya no son tiempos propicios para los embalses faraónicos. En su lugar las eléctricas pretenden hacer una presa de cerca de cien metros de altura, con una capacidad de almacenamiento de algo más de 113 hectómetros cúbicos. Además del naviego, afectará a los municipios de A Fonsagrada e Ibias. No quedarán pueblos bajo el agua, pero sí una zona de vegetación excepcional que forma parte del lugar de interés comunitario Ancares-Courel, de la Reserva de la Biosfera y del proyectado y controvertido parque natural.

Por estos motivos y porque será la cuarta barrera artificial del río, los ecologistas de Adega reiteraron su oposición al proyecto. Recuerdan que Touriño se había comprometido a informar desfavorablemente el estudio de impacto, pero dicen que ahora corren vientos mejores para las eléctricas, tanto en la Xunta como en Madrid. Piden respeto a la directiva marco del agua.