La influencia de una intensa borrasca centrada cerca del golfo de Vizcaya hará que persista la inestabilidad en Galicia. De hecho, se mantiene la alerta roja en todo el litoral, ya que se espera que el oleaje supere los nueve metros. En tierra, el nivel es de alerta amarilla por vientos que podrían superar los 80 kilómetros por hora, especialmente en la costa y en los puntos altos de montaña. Además, se producirán chubascos generalizados, de mayor intensidad en el norte de A Coruña y Lugo; en algunas zonas del interior las precipitaciones pueden adoptar forma de tormenta. Los pronósticos advierten por primera vez en lo que va de otoño de aparición de nieve, pero a cotas altas, de 1.300 metros, en áreas de montaña de Lugo y Ourense. Mañana el nivel de alerta en el litoral se rebaja de rojo a naranja, con olas de 5 a 7 metros.