Los aerogeneradores están en la zona de aproximación de los aviones
12 feb 2011 . Actualizado a las 00:49 h.El Gobierno gallego ha adjudicado a Aldesa Energías Renovables S.?L. un parque eólico que invade el área de seguridad del aeropuerto coruñés de Alvedro. El proyecto de la empresa, con una potencia asignada de 45 megavatios, consta de diez aerogeneradores de más de 150 metros de altura que se ubican enteramente en la zona de aproximación de los aviones, algo que no está permitido en el documento de servidumbres aeronáuticas del plan director de Alvedro.
Un informe técnico elaborado por ingenieros al que ha tenido acceso este diario muestra también cómo dos de los cinco aerogeneradores autorizados por la Xunta a Financiera Maderera S.?A. (Finsa) en el parque eólico Pedrouzos (21 megavatios) podrían estar también en zona prohibida.
El informe constata además que otras dos adjudicaciones de la Xunta ?el parque de Pico Cedeira (48 megavatios) a Sigenera S.?L. y el parque O Picoto (3 megavatios) a Cortizo Eólicas? podrían tropezar con la futura expansión del aeropuerto de Alvedro, aún sin perfilar. La adjudicación a Aldesa en plena zona de servidumbres del aeródromo coruñés hace presagiar la inviabilidad de un parque al que Industria puntuó mejor por la posición de los aerogeneradores, más expuestos ahí al viento. La duda que surge es si con un cambio de ubicación los molinos obtendrían la misma nota respecto a sus competidores.
Los datos sobre el proyecto de Aldesa salen a la luz días después de que se conociese que la Xunta había adjudicado a Norvento un parque eólico en Monte Xesteiras (Cuntis) que invade la zona de seguridad del flamante radar instalado allí por MeteoGalicia para predecir la evolución de fenómenos meteorológicos adversos, como inundaciones o temporales.
La resolución de la Xunta por la que se reparten 2.325 megavatios cuenta ya con los primeros recursos en contra. La primera en anunciarlo fue Gamesa, y hace días hizo lo propio Nieglaben S.?L., empresa participada por la Confederación Galega de Minusválidos (Cogami). Algunas empresas consideran que el modo precipitado en el que se resolvió el concurso ha desencadenado graves errores que hacen presagiar un aluvión de recursos que podrían ralentizar el proceso.