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Más de 31.000 alumnos tendrán un portátil en el aula el próximo curso

serafín lorenzo SANTIAGO / LA VOZ

GALICIA

Educación ampliará el proyecto que iniciaron con retraso 14.500 escolares

25 feb 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

La dificultosa introducción de las nuevas tecnologías en el sistema educativo gallego, que ha arrancado este curso con la distribución de ordenadores portátiles para 14.500 alumnos de primaria y secundaria, tendrá continuidad a partir de septiembre, con la extensión del proyecto Abalar a 17.000 escolares más, hasta llegar a un total de 31.500. Feijoo destacó ayer que, con la incorporación del programa a sexto de primaria y segundo de ESO, Educación duplicará el curso que viene el número de aulas con contenidos digitales.

En su comparecencia posterior a la reunión semanal del Consello de la Xunta, el presidente resaltó que esta ampliación del proyecto para implantar las clases digitales hasta abarcar los 31.500 alumnos permitirá llegar el próximo año académico al 15% del alumnado de primaria y secundaria de Galicia. De este modo, apostilló, las nuevas tecnologías financiadas con recursos públicos estarán operativas en 1.500 aulas, el doble que en este curso.

La extensión del proyecto Abalar a esos 31.500 alumnos permitirá alcanzar en el curso 2011-2012 el 36% de los 87.124 que Educación se ha marcado como objetivo para esta legislatura, de forma que en el 2013 la informatización llegue a 4.379 aulas de más de un millar de centros, lo que requerirá la formación específica de 15.000 docentes. En la actualidad, los 14.500 escolares que disponen de portátil para seguir las clases corresponden a 700 aulas de quinto de primaria y primero de secundaria de 300 centros públicos y concertados. Pero la puesta en marcha del programa ha resultado más laboriosa de lo previsto y los ordenadores han comenzado a funcionar con retraso. En diciembre, la Consellería de Educación admitió que el 50% de los portátiles todavía no estaban operativos. De hecho, las aulas digitales no alcanzarán el pleno rendimiento hasta el tramo final del curso.

Las demoras son consecuencia de la falta de formación y de los problemas técnicos. La formación de los docentes se ha realizado de forma simultánea a la instalación de los equipos. Con todo, el primer contratiempo para la implantación del proyecto Abalar fue la distribución tardía de los ordenadores y pizarras digitales a esos 14.500 alumnos y a alrededor de medio millar de docentes. La empresa adjudicataria incumplió los plazos de entrega.