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Un pequeño terremoto causa alarma en Santiago

E. Araújo, / r. iglesias SANTIAGO, RIBEIRA / LA VOZ

GALICIA

El epicentro del seísmo, de magnitud 3,2, se localizó en Trazo, pero también se dejó sentir en Ames, Teo y Oroso

14 mar 2011 . Actualizado a las 10:06 h.

Un terremoto de magnitud 3,2 en la escala Richter se dejó sentir a las 14.20 horas de ayer en la comarca de Santiago. El epicentro de este seísmo se localizó en Viaño Pequeno, la capital del municipio de Trazo, ubicado a veinte kilómetros de la capital de Galicia. En este lugar, numerosos vecinos se alarmaron por lo que para muchos fue un fuerte temblor, que hizo retumbar las paredes de numerosas viviendas de la zona, aunque no hay constancia de que hubiese daños de ningún tipo, pero sí gran preocupación.

Si en Viaño Pequeno el susto fue mayúsculo, el temblor también se notó en toda la ciudad de Santiago y en los municipios limítrofes de Ames, Teo, Vedra y Oroso, pero con menor alarma, aunque las llamadas a los servicios de emergencia y a la Policía Local de Santiago y de otros concellos fueron una constante minutos después del temblor.

También en Ribeira

Quienes no se percataron de nada fueron los conductores que en ese momento circulaban por el propio municipio tracense, por lo que no se registró ningún accidente a esa hora. Coincidiendo con el momento del seísmo, Arzúa celebraba la Festa do Queixo y en Boqueixón ensalzaban a la filloa, pero nadie se percató de lo ocurrido.

El seísmo de Viaño Pequeno no fue el único que ayer sufrió Galicia, ya que alrededor de la una de la tarde también se produjo un pequeño terremoto en la localidad barbanzana de Ribeira. En este caso se trató de un temblor de magnitud 1,7 en la escala Richter y no causó alarma en la zona ni ningún tipo de incidencia, según confirmaron la Policía Local y el servicio de bomberos.

Desde el Instituto Geográfico Nacional, dependiente del Ministerio de Fomento, se aseguró que este pequeño temblor está dentro de la sismicidad propia de este municipio barbanzano, y que es habitual que se produzcan ligeros movimientos con frecuencia, pasando inadvertidos para la población. El de ayer fue imperceptible para los vecinos de la localidad.