Los pacientes psiquiátricos que actualmente están en el Centro Asistencial San Rafael, de Castro de Ribeiras de Lea, serán distribuidos entre otros dos centros, según informó ayer en el Parlamento la conselleira de Sanidade, Pilar Farjas, en respuesta a una pregunta presentada por la diputada socialista lucense Concepción Burgo. De acuerdo con lo manifestado, cuando entre en servicio el nuevo hospital los pacientes psiquiátricos agudos serán atendidos en este centro, en tanto que los crónicos serán enviados al hospital de media y larga estancia, que será habilitado en el edificio de Calde.
Farjas anticipó que la Consellería de Traballo «propón a súa colaboración á Deputación para estudar e achegar unha alternativa de centro social adecuado para os residentes crónicos do San Rafael que non requiran tratamento psiquiátrico pero necesiten residir nun centro social por carecer de familia ou rede social de apoio ou coidados». Con respecto al personal que trabaja en los dos hospitales de la Diputación, la titular de Sanidade manifestó que el Sergas ofrece la integración «a todos os traballadores sanitarios» dependientes de la institución provincial.
Críticas del PSOE
La diputada socialista autora de la pregunta considera que la respuesta de la conselleira es la confirmación de que el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, y el presidente provincial del PP, José Manuel Barreiro, no cumplirán la promesa que les hicieron a los vecinos de Castro de Rei durante la pasada campaña electoral, de que el San Rafael seguiría siendo un hospital psiquiátrico. Tras anunciar que volverá a llevar el asunto al Parlamento, Concepción Burgo se preguntó qué quiere decir la conselleira con la afirmación de que integrarán a «todos os traballadores sanitarios dependentes da Deputación», porque en esos centros también trabajan personas que no son sanitarias pero desempeñan funciones de administración y otros puestos».
La titular de Sanidade anunció también que en días próximos la Xunta trasladará a la institución provincial una propuesta para «acadar fórmulas de colaboración que, sobre a base da corresponsabilidade, sirvan para propoñer alternativas viables para ambos centros no marco do apoio aos concellos da provincia de Lugo».
Farjas aludió al proceso de transferencias con una primera comisión en el año 2003, y otra formalizada en el 2008. Las tres ponencias presentaron informes incompletos y la reunión «rematou sen que se firmase acta algunha», matizó.