El equipo de A Pinguela cumple su segunda semana de pretemporada. Las cinco jugadoras que están a las órdenes del nuevo entrenador, Martín Cardozo, están realizando intensas sesiones preparatorias de dos horas y media diarias. A pesar de lo poco que falta para que comience la liga -será el 15 de octubre-, el equipo llegará en buen estado.
«Aunque somos pocas, tengo que decir que hemos empezado muy bien y la intensidad que Martín imprime a los entrenamientos nos pondrá al nivel de las incorporaciones que vayan llegando y listas para empezar a competir», comentó Verónica Contreras.
A sus 35 años, la colocadora peruana está llamada a ser una de las referencias del equipo. Lo asume como un reto, sobre todo porque es consciente que los objetivos de la temporada son las de ayudar a formar a las jóvenes promesas del club. «Competiremos al máximo para ofrecer buen voleibol al público y compensar de alguna manera la mala campaña anterior que nos llevó al descenso. No obstante, nuestra meta es ayudar a las canteranas a que adquieran la experiencia necesaria para convertirlas en referentes de A Pinguela a medio plazo», señaló Contreras.
La jugadora sigue el discurso del club, catalogando la campaña como de «transición».
Sant Cugat
El partido de la segunda jornada de la Superliga 2 Femenina de Voleibol entre A Pinguela y Sant Cugat, previsto para el 22 de octubre, se jugará en el pabellón de los institutos al estar el polideportivo municipal en obras.
Aunque en principio, la directiva que preside José Ramón Martínez Mareque valoró la posibilidad de pedir el cambio y disputarlo en Barcelona, al final optaron por jugarlo en Monforte. «Al ser un caso excepcional, la federación nos permite disputarlo en el pabellón de los institutos. Optamos por esta opción porque si no no habría voleibol en Monforte hasta noviembre», dijo Mareque.
El ente federativo solo prohibiría al equipo jugar en este pabellón si lo tuviera que utilizar toda la temporada. La directiva espera que el polideportivo municipal esté listo en noviembre.