Seis años después de su clausura y sellado, el antiguo vertedero de Teixeiro reclama de nuevo la atención de la Xunta, en concreto de la Consellería de Medio Ambiente. Este departamento autonómico prepara un proyecto para corregir las deficiencias en su sellado, así como para la puesta en marcha de la depuradora de aguas residuales. Son pasos previos al aprovechamiento que del biogás del antiguo basurero pretende hacer la Xunta, al igual que en los de Santiago, Ferrol, Ourense y Pontevedra.
La Xunta y el Estado establecieron un convenio para la desgasificación de los citados vertederos, con aprovechamiento del biogás. En el caso de Lugo, la cantidad disponible para el citado fin asciende a 180.000 euros.
El vertedero de Teixeiro fue sellado en el año 2001, como recuerda la Consellería de Medio Ambiente, que a través de su servicio de comunicación explicó las deficiencias que presenta el antiguo basurero. El citado departamento autonómico asegura que «está a realizar un estudo para subsanar as deficiencias detectadas». Según parece «non foi clausurado correctamente». En este sentido, la citada consellería pretende corregir los defectos de la actual planta depuradora de aguas residuales o la instalación de una nueva. Igualmente, se pretende dotar de suministro eléctrico a estos terrenos.
Un dato llamativo es que entre las acciones previstas figura a estas alturas la instalación de chimeneas para la salida de los gases generados por los residuos. Medio Ambiente indica que sus previsiones incluyen la ejecución en el próximo año de las labores de mejora del sellado para, a continuación, proceder al aprovechamiento del biogás.
Las obras de clausura del vertedero de Teixeiro se dieron por concluidas el 18 de diciembre del 2001. El entonces presidente de la Xunta, Manuel Fraga, asistió al acto en el que se celebró el fin de los trabajos. Las obras tuvieron un coste de casi 1,8 millones, cantidad que cubrió la Xunta en el 85%. En el transcurso de este acto se aseguró que los técnicos estudiaban la posibilidad de aprovechar los 2.000 metros cúbicos por hora de gas que, según sus estimaciones, podía llegar a generar la basura acumulada en Teixeiro. El alcalde, José López Orozco, aseguró que el sellado del vertedero suponía devolver a la naturaleza lo que le prestó al Ayuntamiento durante años.
Con el cierre del vertedero de Teixeiro, el municipio de Lugo se incorporó a la red de Sogama para el tratamiento de sus residuos sólidos urbanos, mediante la planta instalada en el antiguo mercado ganadero de O Ceao, que aún está operativa.
En Teixeiro, según los datos facilitados con motivo de su sellado, se depositaron más de 300.000 metros cúbicos de basura. Entró en servicio durante el mandato del alcalde Quiroga.