Aumenta la tensión entre los vecinos de Sarria por los cortes continuos de agua

SARRIA

11 feb 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Los vecinos de Sarria ya se están acostumbrando a acudir a trabajar sin poder asearse debido a los continuos cortes en el suministro de agua que está sufriendo la villa en los últimos días.

Cuando apenas se habían recuperado del cabreo de no disponer de agua corriente la mañana del pasado lunes, ayer a primera hora de la mañana volvieron a encontrarse con la desagradable sorpresa de comprobar como de los grifos no volvía a manar el líquido elemento hasta la mitad de la mañana.

Avería repetida

El motivo de la avería volvió a ser idéntico al sucedido hace dos días, un reventón en la cañería general a la altura de la zona de As Aceas.

El fallo volvió a producirse a altas horas de la madrugada y los técnicos de la empresa concesionaria se pusieron de inmediato a trabajar en su resolución, aunque al tratarse nuevamente de una avería grave necesitaron de varias horas para solucionarla.

El problema añadido fue que en esta ocasión la rotura se produjo en una zona habitada y los vecinos que a primera hora de la mañana tuvieron que coger sus vehículos para dirigirse a sus respectivos centros de trabajo se encontraron con la desagradable sorpresa de que una gran parte de la calle estaba cortada y otra, abierta en el lugar en el que tenían que realizar la reparación.

«La situación era dantesca y lo peor es que los trabajadores encargados de solucionar el problema parecía que no le daban demasiada importancia y poco menos que nos decían que teníamos que resignarnos», dijo uno de los damnificados por el suceso.

En el lugar, el enfado de los vecinos era importante, pero no era menor el de algunos responsables de establecimientos de hostelería que aprovechan las primeras horas de la mañana para realizar tareas de limpieza y a los cuales el corte en el suministro de agua les impide trabajar.

La realidad es que dos interrupciones tan seguidas y de tal duración no se producían desde hace bastante tiempo y además nunca habían sucedido durante el invierno. Por ello, un gran número de vecinos estaban muy molestos y exigían soluciones urgentes.