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El retraso en las obras de la A-54 impedirá abrir tramos en el 2011

Suso Varela Pérez
Suso Varela LUGO/LA VOZ.

LUGO

Fomento tenía previsto para finales del 2012 la apertura total, salvo Palas-Arzúa

09 ago 2010 . Actualizado a las 10:50 h.

La paralización de las obras de la autovía Lugo-Santiago en el tramo entre Vilamoure y Monte de Meda, de apenas seis kilómetros, provocará que no se puedan cumplir las previsiones de poner en servicio este trazado a lo largo del próximo año, tal y como tenía previsto el Ministerio de Fomento. Las obras fueron adjudicadas el 29 de febrero del 2008 a la UTE de las empresas Cyopsa y OPR, con un plazo de ejecución de 22 meses y por un valor de 25 millones de euros. Este tramo tenía presupuestado para el presente ejercicio 16,4 millones de euros, pero la reprogramación de obras llevada a cabo por Fomento a finales de julio recortó la inversión en hasta 13,6 millones, con lo que las empresas tuvieron que despedir a finales de julio a sus trabajadores.

La pasada semana se podía ver un par de obreros de empresas subcontratadas terminado algún aspecto de la obra. Ahora, este tramo se encuentra a la espera de que o bien en la nueva reprogramación -que anunciará el ministerio este jueves- se pueda inyectar alguna partida para que sigan los trabajos, o bien el ministerio convenza a las adjudicatarias para que adelanten el dinero.

El tramo Vilamoure-Monte de Meda es el más avanzado de las obras de la autovía a Santiago y sería el primero en abrirse. Desde que tomó posesión José Blanco como ministro de Fomento su compromiso con esta autovía fue claro, tanto en palabras como hechos. Así, se adjudicaron la gran mayoría de las obras (paralizadas durante el mandato de Magdalena Álvarez) y comenzaron los trabajos de forma inmediata.

Todo iba encaminado para que a lo largo del 2012 estuviesen operativos todos los tramos de esta autovía (salvo el Palas-Arzúa, es estudio de impacto ambiental), calificada de prioritaria por el ministro lucense. Pero ahora los recortes presupuestarios obligarán a que los plazos se tengan que alargar por lo menos un año en alguno de los tramos.

Por ejemplo, el trazado entre Monte de Meda y Guntín, de 10,8 kilómetros y adjudicado en abril del 2009 por valor de 42 millones de euros, apenas tiene iniciados los trabajos. Sacyr dispuso de 1,7 millones de los Presupuestos Generales del Estado para este año y ya están gastados. La fecha de finalización estaba prevista para el 2012, pero sin apenas obras ejecutadas, será difícil que se cumplan los plazos. Lo mismo sucede con el tramo entre Lavacolla y Arzúa, donde Dragados ya están parando la obra en el entorno del aeropuerto. Donde se trabaja a buen ritmo es en el trazado entre Guntín y Palas de Rei.