Blanco apuesta por la A-8 y la A-54, pese a la gran bajada presupuestaria

L.R.I. / E.G.S. LUGO/LA VOZ.

LUGO

01 oct 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La autovía del Cantábrico (A-8) y la autovía Lugo-Santiago (A-54) se llevarán el grueso de la inversión pese al fuerte recorte que sufrirán los Presupuestos Generales del Estado para el 2011, presentados ayer en el Congreso de los Diputados. El ministro de Fomento, el lucense José Blanco, mantiene su apuesta por estas dos infraestructuras claves para la provincia de Lugo, ya que según recogen las cuentas, la A-8 recibirá una inversión superior a los 41 millones (41.340.000 euros); si bien, varios tramos entrarán en servicio uno o dos años después de lo previsto.

Algo similar ocurrirá en la A-54, que dispondrá de un presupuesto superior a los 36 millones (36.358.810 euros). Con todo, ambas partidas quedan muy lejos de las que el Gobierno había proyectado para el ejercicio actual: 96,5 y 55,7 millones respectivamente.

La A-56, que unirá Lugo y Ourense, también avanzará, aunque su inversión total no alcanzará el millón de euros. Por otro lado, las cuentas del gobierno central prevén que el 2011 sea el año del impulso definitivo al tercer puente sobre el Miño en Lugo, para el que Fomento ha consignado nueve millones de euros.

La nota pesimista en el capítulo de infraestructuras la vuelve a dar el tren de alta velocidad, con partidas simbólicas para las líneas Ponferrada-Monforte y Lugo-A Coruña. Solo se salva el proyecto Ourense-Lugo, que percibirá 5 millones de euros. Hay que destacar que el Gobierno consigna fondos por primera vez -200.000 euros- para la estación intermodal de Lugo. El Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino completa la inyección económica en la provincia con partidas destacables para el saneamiento y la segunda fase del abastecimiento a la ciudad amurallada, entre otros proyectos.