Washington estrecha el cerco alrededor de Assange y Wikileaks

Imanol Allende LONDRES/LA VOZ.

INTERNACIONAL

La policía británica afirma que espera una nueva orden de arresto para proceder a detenerlo

04 dic 2010 . Actualizado a las 03:39 h.

Puede que en estos momentos Julian Assange esté en algún lugar no muy lejano de Londres sopesando cuáles serán sus próximos movimientos. Esta situación de prófugo no ha evitado que utilice los mismos medios que Wikileaks, la Red, para contactar y responder a las preguntas de los lectores sobre la versión digital del diario británico The Guardian . Pero al mismo tiempo que aumenta la presión judicial sobre Assange, crece la que busca cerrar el acceso de Wikileaks a Internet en todo el mundo.

El australiano destacó el heroísmo de la persona supuestamente responsable de las filtraciones, Bradley Manning. «Si tal como dice el Pentágono este joven soldado es el responsable de la filtración, entonces es evidente que no existe un héroe como él», indicó. Un lector le preguntó si es consciente de que lo acabarán cogiendo: «¿No ve que no puede ganar?». A lo que Assange respondió que «la historia ganará, el mundo será un lugar mejor». Aseguró que ante las amenazas de muerte ha tomado «las medidas necesarias posibles cuando se trata de una superpotencia [la que amenaza]». Otros lectores lo increparon por poner en peligro la vida de soldados por las filtraciones. Assange se defendió diciendo que «nadie ha podido demostrar, ni siquiera el Pentágono, que alguien haya muerto por las filtraciones».

El cerco internacional no se limita a Assange. El servidor que aloja a WikiLeaks en Francia, OVH, informaba ayer que preguntará a la Justicia si la página fundada por Assange es ilegal, después de que el Departamento de Economía Digital galo iniciara las gestiones para expulsar al sitio. «Ante las últimas declaraciones políticas y las presiones que comienzan a notarse, hemos decidido pedir a un juez que se pronuncie sobre la legalidad de este sitio en territorio francés», indicó OVH en un mensaje.

Wikileaks acusó ayer a Amazon de mentir y actuar con cobardía tras escuchar los argumentos que ha ofrecido su filial, Amazon Web Services, para justificar la expulsión del sitio de sus servidores en EE.?UU. Esta decisión, según Amazon, no fue producto ni de la presión de Washington ni de los ataques de denegación de servicio (DDOS) que Wikileaks está sufriendo. Según Amazon, «Wikileaks no está cumpliendo» los términos del contrato. Assange indicó en The Guardian que su organización había puesto a prueba a ciertos servidores en ciertas jurisprudencias, «como Amazon en Estados Unidos», para comprobar su grado de libertad.

El único aliado de Wikileaks en las últimas horas ha sido la nueva IP suiza a la que WikiLeaks ha recurrido tras su desalojo en Estados Unidos, perteneciente al Partido Pirata helvético, cuyo presidente, Daniel Simonet, anunció en su blog su apoyo al fundador de esta organización.

Por otro lado, Scotland Yard espera la llegada inminente de una nueva orden de arresto emitida por la Justicia sueca contra Assange, por lo que su detención podría practicarse en las próximas horas. Mientras, su abogado en Londres, Mark Stephens, indicó a The Guardian que nadie de su entorno ha oído que Scotland Yard posea una orden de arresto de su cliente. «Tenemos un acuerdo con Scotland Yard por el que, en el caso de que quieran contactar con nuestro cliente, tienen que hablar primero con nosotros para arreglar una cita, pero por el momento no tenemos constancia de que quieran hablar con él», indicó Stephens.