Adicae convocó ayer en asamblea a las decenas de afectados por la compra de participaciones preferentes que Novagalicia -comercializadas en tiempos de Caixa Galicia y Caixanova- y otras entidades bancarias colocaron entre la clientela como si fueran depósitos a plazo. La asociación explicó que se interpondrá una denuncia a la entidad, que vendió hasta 1.028 millones de euros en participaciones preferentes, a una media de 30.000 euros por persona. Los afectados coinciden en denunciar que los empleados de banca les hicieron creer que contrataban depósitos fijos a cinco años, cuando no lo eran, y que se han sentido estafados cuando no han podido retirar sus ahorros. Adicae calcula que en Galicia hay más de 400 afectados solo en Novacaixagalicia. La venta de preferentes se generalizó en toda la banca entre el 2008 y el 2009.