El insólito fruto de las playas de A Illa

maría santalla VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

La biblioteca inauguró ayer en O Bao la actividad «Mariscando libros»

28 jul 2012 . Actualizado a las 06:50 h.

Es de todos conocido que las playas de A Illa producen de los mejores mariscos del mundo, si no el mejor. Pero lo que nadie sabía hasta ayer es que en los arenales isleños también pueden mariscarse libros. Tamaño descubrimiento se debe a los jóvenes usuarios de la biblioteca de la localidad, que ayer se convirtieron en mariscadores de letras para promocionar la lectura en las playas de bandera azul.

La actividad, ideada por la responsable del centro de lectura isleño, Ángela Otero, estaba previsto que comenzase unas semanas antes, pero el retraso del verano obligó también a aplazar su inicio. Ayer fue, por tanto, el primer viernes de esta actividad, y para iniciarla se eligió la playa de O Bao, una de las dos -la otra es Area de Secada- con bandera azul en A Illa.

Vestidos con unas llamativas camisetas identificativas y con sus calderos llenos de libros, los voluntarios de la biblioteca y la propia bibliotecaria Ángela Otero partieron hacia el arenal. En sus baldes llevaban novelas, cómics, libros infantiles, revistas y la prensa del día. Así que quien quiso acercarse a ellos y aprovechar para dedicarse un rato a la lectura, pudo hacerlo.

Mientras, quienes prefirieron escuchar historias antes que leerlas también tuvieron ocasión de hacerlo, puesto que estos mariscadores de libros de A Illa, que saben hacer de todo y leen a las mil maravillas, se convirtieron en cuenta cuentos para sus vecinos y para los turistas que ayer eligieron la playa de O Bao para pasar la mañana.

Esta campaña de fomento de la lectura continuará cada viernes durante el verano, y se celebrará desde las once de la mañana a la una de la tarde en las dos playas con bandera azul. Es otra de las ingeniosas iniciativas que pone en marcha la biblioteca isleña con el fin de promover el uso de los libros, en este caso con la premisa de que la playa y la lectura son siempre buenos aliados.