Una línea de bus unirá el centro con el complejo de Fontecarmoa

Rosa Estévez
Rosa Estévez VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

MARTINA MISER

Pereira asegura que el servicio se pondrá en marcha «cuanto antes»

08 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.

Después de un largo proceso burocrático, la empresa Pereira acaba de recibir autorización para establecer una línea de autobuses que unirá el centro de Vilagarcía con el complejo deportivo de Fontecarmoa. Con ella se satisfará una vieja demanda de la localidad, ya que hará mucho más accesible instalaciones como el pabellón, la piscina o las pistas de tenis y atletismo al conjunto de la ciudadanía. Hasta ahora, acudir a practicar deporte exigía peregrinar a Fontecarmoa en coche particular o bien ejercitando los músculos en un paseo que bien podría considerarse un calentamiento.

De momento, aún no hay fecha exacta para el inicio de los servicios de este bus. «Llevábamos muchos años de trámites», explican desde la empresa, y recientemente Transportes se ha pronunciado sobre este asunto. «[La línea] nos la acaban de autorizar», explica María Luisa Pereira, portavoz de la firma.

Con el permiso aún freso en sus manos, queda mucho trabajo por hacer antes del primer viaje. «Es necesario modificar servicios, hacer pruebas...». Así que Pereira prefiere no dar fechas concretas, aunque sí garantizan que el primer autobús hacia el complejo deportivo arrancará «cuanto antes mejor». «De forma inminente comenzaremos a realizarlo en determinados horarios», sentencian desde la empresa concesionaria.

La puesta en marcha de esta línea significará mejorar cualitativamente el acceso a una zona apartada del casco urbano y a la que cada día se acerca un sinfín de personas. Conscientes de esa realidad, en Pereira confían en que la nueva línea sea un éxito en lo que a número de viajeros se refiere.

«Efectivamente -explican- esperamos que este servicio tenga muy buena acogida, pues así nos lo manifestaron las asociaciones, el Concello de Vilagarcía y el resto de colectivos a los que hemos contado nuestras intenciones». El tiempo despejará la incógnita.