Si hay perros sueltos por las calles y los vecinos se ponen en contacto con alguno de los tres laceros contratados por Tragsa para hacerse cargo de la nueva perrera provincial de Meis, las instalaciones empezarán a recibir hoy a los primeros inquilinos. El albergue tiene capacidad para 500 animales y, según la Diputación de Pontevedra, su objetivo principal es promover la adopción entre los vecinos.