27 may 2013 . Actualizado a las 06:52 h.
Dos parroquias arousanas renovaron ayer sus tradiciones más queridas. En Vilagarcía, los vecinos de A Xunqueira celebraron el día grande de sus fiestas patronales, después de haber elaborado, durante toda la noche, las clásicas alfombras de flores con las que adornan la procesión. Por su parte, Vilariño, en Cambados, conmemoró la trigésimo segunda Festa do Labrego, que se inició con un vistoso desfile de carros del país. fotos martina miser