El curso, promovido por un grupo de profesores del municipio, fue impartido por Eva Rodríguez, pionera en la implantación de esta técnica en España
17 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Meaño fue el municipio elegido para presentar, durante el pasado fin de semana, una novedosa terapia que permite tratar, con una serie de ejercicios, trastornos como el déficit de atención, el autismo o la dislexia. El curso, promovido por un grupo de profesores del municipio, fue impartido por Eva Rodríguez, pionera en la implantación de esta técnica en España. La misma se basa en los reflejos primitivos, que son los movimientos automáticos que, por ejemplo, ayudan al bebé a nacer.
Fue un médico sueco, el doctor Harald Bolmberg el que desarrolló la técnica del Entrenamiento de Movimiento Rítmico e Integración de Reflejos Primitivos, explica Rodríguez. Esta se basa en que cuando nacemos «venimos con una serie de reflejos primitivos, como el de succionar. Es un movimiento automático que se activa con un estímulo», añade. Poco a poco, el cuerpo se va desarrollando y estos movimientos van desapareciendo.
La técnica de reflejos primitivos consiste en realizar un estudio para «ver si todavía estos reflejos están muy presentes en el cuerpo. Si es así, hay algo que no se ha desarrollado perfectamente», añade. Sucede en niños que, por ejemplo, sacan la lengua cuando están escribiendo, «Eso quiere decir que hay una habilidad que no han conseguido», añade Rodríguez.
Ejercicios
Para corregir estas situaciones, se realizan una serie de ejercicios que están basados precisamente en ese reflejos, con el fin de conseguir que ese reflejo quede perfectamente integrado. «Si un niño se tropieza mucho, se le caen las cosas de las manos con facilidad, tiene mala postura o no puede parar quieto en una silla... no es casual, puede que tenga algún reflejo no integrado. Podemos evaluarlo y ponerle un programa de ejercicios sencillos para integrarlos», explica.
Rodríguez sostiene que esta técnica está especialmente indicada para tratar trastornos como el TDH o aquellos del espectro autista. También se emplea para corregir problemas como la dislexia, la falta de coordinación y de equilibrio. El curso que se celebró en Meaño fue el primero que se impartió en Galicia, gracias a la iniciativa de un grupo de profesores interesados en las terapias complementarias. En enero volverá a celebrarse una segunda edición.