La falta de espacio en los juzgados obliga a usar el garaje y las celdas como almacén
VILAGARCÍA DE AROUSA
Los sindicatos denuncian que los trabajos de expurgo no avanzan, mientras papeles y pruebas se acumulan
19 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Esta vez ha sido el sindicato Alternativas na Xustiza-CUT quien ha puesto el grito en el cielo. Pero la suya es una denuncia recurrente: los problemas de espacio en los juzgados de Vilagarcía son cada vez mayores. Los funcionarios los padecen -muchos han sido acomodados en lugares que no habían sido diseñados para tal uso- y los padecen, también, los archivos judiciales. La situación de estos, denunció ayer Alternativas na Xustiza, no ha hecho más que empeorar en la capital arousana. Y a estas alturas, «a falta de espazo obriga a utilizar as celas de presos (nas que hai ratas) e o garaxe para albergar o arquivo definitivo».
Las denuncias del sindicato van más allá. A través de un amplio compendio fotográfico, muestran cómo la documentación del juzgado «e as pezas de convicción, atópanse nas escaleiras» y en cualquier lugar en el que quepa un alfiler. En esa situación precaria se hallan incluso documentos del registro civil, muchos de ellos de valor «documental e histórico, polo cal deberían estar nun arquivo histórico pola súa relevancia».
Desde el sindicato Alternativas na Xustiza-CUT afirman que «esta documentación debería estar custodiada por persoal xudicial e non estar nun garaxe ou nunha sala de computadores», al tiempo que sostienen que «a falta de salubridade xa produciu enfermidades aos traballadores».
Un problema «palmario»
La situación de los juzgados de Vilagarcía, explica desde la CIG José Barreiro, no es algo excepcional: por desgracia, el mismo panorama se repite en buena parte de las salas judiciales de la provincia. Como Alternativas na Xustiza, llega a la conclusión de que este problema mana de dos fuentes distintas. Por un lado, el expurgo no avanza cómo debería. «E se non quitas os papeis vellos, e segues metendo novos papeis, a conclusión é evidente», dice Barreiro. Por otro lado está el asunto de la digitalización de la vida judicial, que es un proyecto que no acaba de trasladarse a la realidad, por lo que se siguen generando cantidades ingentes de papel que obligarán a seguir colonizando espacios.
Sobre esos dos pilares se levantan también las conclusiones del sindicato Alternativas na Xustiza-CUT, que esta vez ha puesto el foco en las carencias del edificio judicial de Vilagarcía. Un entorno en el que los trabajadores intentan «aproveitar o mínimo espazo» y se encuentran con que ni siquiera se atienden sus peticiones de cajas de distintos tamaños en las que poder almacenar, con unas mínimas garantías, la documentación que pasa por sus manos. O que se ven abocados a trabajar con un programa de archivo que, según este sindicato, nadie les ha explicado.