Ángel Carracedo se quedó impresionado con los estudiantes de Abanqueiro
22 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.«Totalmente impresionado», así se quedó el experto en genética y catedrático de Medicina Legal Ángel Carracedo tras su encuentro de ayer con alumnos del colegio de Abanqueiro. Desde educación infantil y hasta sexto de primaria, el científico tuvo ocasión de conversar, explicar y responder a las cuestiones que le plantearon los chavales. Fue tal la sintonía entre que Carracedo no dejó de mostrar su sorpresa, especialmente por el elevado número de preguntas que le formularon.
A los alumnos de cuarto a sexto de primaria, el profesor les explicó qué es el ADN y su importancia. Sin embargo, y según relató él mismo, los chicos conocían a la perfección su función y, señaló: «Me formularon cuestiones muy creativas».
Estudiantes que enseñan
Si la experiencia con los mayores fue gratificante, la que tuvo con los de primero, segundo y tercero le dejó sin palabras. Fueron los propios escolares quienes le mostraron sus experimentos sobre energía estática y, no contentos con eso, lo hicieron en inglés.
Los papeles se invirtieron entonces y era Ángel Carracedo quien preguntaba a los pequeños investigadores. Según aseguró, conocían a la perfección los asuntos planteados y no dudaron a la hora de responder.
Hasta los críos de educación infantil dejaron fascinado al director del Centro Nacional de Genotipado. Al término de la sesión, todo eran elogios de Ángel Carracedo: «Estos chicos tienen un nivel muy alto, creo que están muy bien estimulados. Tienen unos profesores modélicos».
Precisamente, estos encuentros con un científico de la talla de Carracedo tienen por objeto estimular el afán investigador entre los jóvenes.
El doctor en medicina explicó que solo en un par de ocasiones ha mantenido encuentros con estudiantes tan jóvenes, mientras que sí es frecuente que los realice con alumnos de bachillerato. Sin embargo, afirmó que merece la pena una experiencia como esta por la creatividad demostrada por los estudiantes.
Los alumnos de Abanqueiro parecen tener un camino ya andado, al menos en su afán por la investigación, un campo al que muchos de ellos dicen que quieren dedicarse.