El profesional es uno de los fundadores de la entidad constituida para la puesta en marcha de un centro de exámenes en Arousa norte
30 mar 2014 . Actualizado a las 08:00 h.José Romero presidente de la sociedad de empresarios de autoescuelas de santiago
La lista de damnificados por la crisis es muy extensa y las autoescuelas forman parte de ella. Conscientes de que la unión es el único camino, profesionales del sector en la comarca han creado una sociedad de empresarios de centros de formación vial. A este grupo, presidido por Ventura Bretal, pertenecen las autoescuelas Ribeira, Miguel, Martiño, Tito, Quico y Estela. Uno de los fundadores de la entidad es José Romero que, a su vez, preside desde el pasado diciembre la Sociedad de Empresarios de Autoescuelas de Santiago.
-¿Qué les llevó a constituir esta sociedad?
-Nace porque en junio de este año finaliza la concesión otorgada por el Gobierno central a los centros en los que se pueden recuperar los puntos del permiso de conducir y se renovarán las concesiones. Los profesionales presionaron para que hubiera una liberalización y cualquier centro pudiese impartir los cursos. Sin embargo, la Administración no quiere porque si hay muchas autoescuelas autorizadas le resultaría difícil hacer un seguimiento y controlar la calidad de los cursos. En esta comarca no hay ninguna autoescuela autorizada y es una vieja reivindicación.
-¿Estando unidos puede lograrse la concesión?
-Vamos a montar un centro de formación en Arousa norte y, de hecho, ya estamos buscando un local. Si estamos juntos podemos conseguir el permiso. No tiene sentido que en la parte sur de la provincia solo puedan recuperarse los puntos en Santiago, cuando en la parte norte hay autoescuelas autorizadas en Carballo, Cee, A Coruña, Ferrol y Cedeira.
-Por su experiencia, ¿sabe si hay mucha gente de la comarca que acuda a los cursos de recuperación de puntos?
-Yo doy clase en el centro de formación de Santiago y sí que hay mucha gente de Barbanza que ha perdido todos los puntos del carné. Incluso, es frecuente que cuando tengo clase lleve a gente que me conoce. Tener que desplazarse hasta Santiago en transporte público, tal y como están las líneas, es un trastorno.
-Otra de sus aspiraciones es lograr que las pruebas prácticas se realicen en la comarca.
-Efectivamente. Comprobamos que a la gente le resulta cada vez más difícil realizar las prácticas porque tiene que invertir una mañana o una tarde en ello. Hay que desplazarse a Santiago y eso implica disponer de tiempo. Si los ejercicios viarios pudieran hacerse en la comarca sería un ahorro para los alumnos y también una ventaja para las autoescuelas. Actualmente, como empresas no somos competitivas porque tenemos unos costes muy elevados. Por eso, las autoescuelas tenemos que unirnos para ser competitivas. En la zona se dan todos los ingredientes para que pueda aceptarse nuestra solicitud. Disponemos de las infraestructuras viarias suficientes para que los exámenes cumplan los estándares de calidad exigidos. Pedimos el apoyo de los ayuntamientos para contar con un emplazamiento físico. Un lugar en al que puedan acudir los aspirantes a tener el carné el día de los ejercicios.
-¿Dónde harían los exámenes?
-No se ha pensado en ningún lugar concreto. El hecho de que el punto de salida sea Ribeira, por ejemplo, no significa que los ejercicios se realicen solo en este municipio. Cada examen dura 25 minutos y puede recorrerse toda la comarca porque en una jornada se examinan varias personas.
-Usted dice que las autoescuelas de la zona no son competitivas debido a los elevados costes que afrontan, supongo que eso se agudizó con la crisis.
-Desde luego. Tenemos unos costes más elevados. Un vehículo nuestro puede hacer unos 500 kilómetros diarios y en Santiago no hacen ni la cuarta parte. Solo el desplazamiento a la capital gallega implica hacer 120 kilómetros por la mañana y otros tantos por la tarde. Además, nuestros vehículos tienen que ser más grandes para poder transportar a cinco personas y un coche cargado consume más combustible y las ruedas se gastan más. Muchas autoescuelas se han visto obligadas a cerrar desde el inicio de la crisis económica e, incluso, las grandes hemos tenido que reducir las plantillas. Aguantamos porque damos también otro tipo de cursos. Si nosotros desaparecemos también son puestos de trabajo que se pierden. Que el examen práctico se realice en la comarca de Barbanza no implica ningún coste asociado para la Administración.
-¿Existen precedentes?
-Está solicitud también se ha hecho en Lalín. En Foz y O Barco de Valdeorras ya se realizan.
«Muchos negocios se han visto obligados a cerrar desde el inicio de la crisis»
«A la gente cada vez le resulta más difícil hacer las prácticas para obtener el permiso»