Cultura urbana, poesía, videocreación o música sirvieron para lanzar un mensaje contra la violencia de género
26 nov 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La educación ha dado un salto de altura en los últimos años. Esa instrucción rancia que defendía que la letra con sangre entra ha sido superada por un arma de mucho más calado, el arte. Y, con motivo de la celebración del día internacional contra la violencia de género, brilló en Barbanza un mensaje a favor de la igualdad a través de todo tipo de expresiones artísticas. Muchas, dirigidas a los más pequeños, con la aspiración de construir una nueva generación en la que no impere el machismo.
Las actividades comenzaron desde primera hora y se prolongaron hasta el anochecer. En la plaza del Concello de Ribeira, por ejemplo, un batallón de profesionales trabajaron con alumnos desde el breakdance, al parkour, el rap y el grafiti. El objetivo era que actuaran codo con codo niños y niñas. Entre todos elaboraron un mural con dos personajes libres de las ataduras de género. «Además, en el grafiti no importa que lo haga un hombre o una mujer, al final lo que vale es el acabado», destacaba O’Ras, de Vella Escola, quien condujo la actividad.
En los centros educativos
También hubo hip hop en el IES Fontexería. En este, como en muchos otros centros, estuvieron trabajando el tema. En el Número Un pintaron de colores los barrotes del frente del instituto y frases contra los malos tratos en el exterior, hubo proyecciones sobre el deporte femenino y una exposición inspirada en las mujeres científicas en el interior. En el centro ribeirense la comunidad educativa se vistió ayer de negro, como en el Félix Muriel, en el que se inauguró un muro a partir de los poemas de Masculino singular y se proyectaron algunos cortos creados por alumnos sobre la violencia machista.
La literatura estuvo también presente en el Leliadoura, con Plácido Betanzos, así como en el Lustres Rivas, donde también sonó la música en el acto organizado por Mulleres en Acción, Memoria Histórica y Altofalante.
Ayer fue un día de declaraciones institucionales, con multitud de actos oficiales y simbólicos, talleres, actividades (hasta deportivas) y concentraciones para conmemorar la fecha. Los buenos propósitos se aderezaron con teatro, monólogos y mucho arte, buscando un mayor impacto.