La investigación ha entrado en punto muerto
28 mar 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El robo de las dos campanas de la iglesia de San Benito de Seráns ha entrado en punto muerto después de que los responsables de la investigación descartasen las dos pistas en las que trabajaban. Las fuentes consultadas explican que una de esas líneas los llevó hasta Lugo, en donde localizaron en las instalaciones de un anticuario dos piezas hechas con el mismo metal y de aspecto muy similar al de las sustraídas en este pequeño templo del municipio de Porto do Son.
Los agentes, gracias a las fotografías que tienen de las campanas robadas y a la ayuda del sacristán, pudieron descartar que los objetos de cobre localizados en la ciudad luguesa fueran los mismos que buscan desde octubre del año pasado.
A mayores, la Guardia Civil amplió su investigación a páginas web en las que se venden todo tipo de objetos de segunda mano. En uno de esos portales se encontraron otras dos campanas con un aspecto muy similar a las sustraídas. En este caso, volvió a ser el sacristán el encargado de certificar que no son las mismas.
Peor hipótesis
Mientras, la Guardia Civil, a través de su unidad autonómica especializada en delitos contra el patrimonio histórico, y con los integrantes del puesto de Porto do Son, sigue trabajando en la localización de las campanas, que pesaban media tonelada. Una de las hipótesis que se maneja apunta a que dichos objetos ya habrían sido fundidas. De confirmarse esta posibilidad, añaden las mismas fuentes consultadas, ya resultaría imposible dar con ellas.