
Los vecinos de Buño se echaron a la calle para acompañar a la Mikaela
17 feb 2013 . Actualizado a las 07:00 h.Las fiestas con sabor a despedida tomaron ayer la comarca para echar el cierre a los entroidos más perezosos. A la espera de los últimos actos previstos para hoy, fueron varias las localidades que dijeron adiós a estos festejos acogiendo unos actos que volvieron a reunir a numerosos vecinos.
Una de las citas más esperadas y multitudinarias tuvo lugar en Cee, donde el cambio de fechas de su concurso de comparsas recibió el aval del público y de las numerosas agrupaciones participantes. Muchos ceenses y otros espectadores llegados de localidades vecinos siguieron el desfile por el centro de la villa y llenaron la plaza 8 de marzo, espacio escogido para el desenlace final del certamen.
Tal como había ocurrido en Dumbría y Fisterra, dos comparsas pugnaban por el primer premio y, de nuevo, la balanza se decantó en favor de Buxantes Calidade (de Dumbría), que en esta ocasión dedicaron uno de sus temas a Zaira Rodríguez y a Daniel Oca, que aguantaron con humor el aluvión de chanzas que le dedicaron la mayoría de las comparsas. El segundo premio fue para A Granxa Desahuciada (Lires), que también introdujo en su espectáculo guiños locales, como los referidos a la limpieza de la playa ceense.
En tercer lugar, pero muy aplaudida por el público también, se clasificaron los miembros de Invasión Guracha (Gures), que pusieron sobre el escenario a un grupo de imitadores de la totalidad de los regidores de la Costa da Morte. Entre todos acordaron salir de la crisis invadiendo Alemania y cumplir esta misión, además, recurriendo a un método muy enxebre y que propició el aplauso generalizado de los presentes, «movendo os marcos». A Rueirada. Aqueles marabillosos anos (Louro), Os Reciclados (Cee), A Romería dos Molladiños (Paderne) y Os Paiasos de Brens (Brens) completaron el palmarés de una divertida velada.
Tampoco faltaron las risas ni los disfraces en Buño, que volvió a disfrutar de una fiesta en la calle de la mano de su provocadora Mikaela. Un auténtico ejército de entroidos acompañó a la original figura, tan voluptuosa y escasa de ropas como en años anteriores, en su recorrido por la localidad. Tras la misa del padre Añón, el personaje sucumbió en el fuego liberador que marca el fin del ciclo festivo, tal como ocurrió también en Muxía con el percebe y en Camariñas con la sardina.
A Choqueira de Cerceda fue otra de las creaciones carnavalescas ajusticiadas en una jornada festiva que se extendió también hasta puntos como Seaia, donde los niños disfrutaron de una fiesta infantil, o Baíñas, donde a última hora de ayer se estaba celebrando otro popular y concurrido de comparsas y disfraces.