Un nuevo patronato regirá el futuro del patrimonio de Man

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

La caseta de Man sigue cubierta por un plastico negro.
La caseta de Man sigue cubierta por un plastico negro. ANA GARCIA

La fundación se reinventa tras cinco años de escasa operatividad

13 ago 2013 . Actualizado a las 07:10 h.

En diciembre del 2008, cuando se cumplían seis años de la muerte de Man de Camelle, se constituía la fundación que se encargaría de proteger y gestionar el patrimonio del anacoreta, uno de los símbolos de la Costa da Morte, reconocido en Galicia y en el resto de España y del mundo (ha dado pie a películas, libros, documentales, exposiciones, esculturas y reportajes variados), fallecido cuando el fuel del Prestige inundaba toda su obra exterior.

Sin embargo, casi cinco años después, la operatividad de esta fundación ha sido muy escasa. Tres de los cinco miembros del patronato original (representante del PP y de la asociación de vecinos, que se marcharon, y la edila socialista Mercedes Martín, que dimitió de su cargo) ya no están. Además, la polémica ha estado presente en numerosos plenos, con preguntas y mociones constantes en este tipo por parte de los populares, muy críticos con la manera de dirigir las cosas del Concello (el alcalde preside el patronato) e incluso anunciaron que llevarían sus cuentas a la fiscalía.

El regidor, Manuel Valeriano Alonso, anunció ayer que se va a crear un nuevo patronato y, por tanto, un nuevo equipo para salvaguardar lo que queda de su obra. Tanto lo que se ve, al rededor de su caseta, como todos sus dibujos y anotaciones. Así que habrá que repetir los pasos ya andados, como preparar varias reuniones con las partes implicadas y protocolizarlo todo de nuevo ante notario. El artista Antón Sobral se encargará de esa dirección técnica. «Queremos que sexa a xente da cultura a que se ocupe disto», apuntó Alonso. Sobral cree que se pueden hacer muchas cosas, sobre todo limpiar y conservar. Un constructor local ya se ofreció a realizar las obras y el arquitecto Xoán Creus ofreció un proyecto.