
La lluvia dejó inundaciones y pudo influir en varios accidentes de tráfico
04 oct 2013 . Actualizado a las 07:00 h.El primer temporal de lluvia y viento del otoño en la comarca, aparte de la activación de la alerta amarilla en toda la comarca, dejó varios accidentes de tráfico que fuentes de emergencias atribuyen a la situación meteorológica adversa, caída de ramas y vegetación en las carreteras y algunas inundaciones.
El siniestro más grave se produjo poco antes de las tres de la tarde en la comarcal AC-552 a la altura de Berdeogas (Dumbría), donde la conductora de un Ford Focus tuvo que ser evacuada en ambulancia después de salirse de la vía por el margen derecho y volcar en la cuneta. Prácticamente a la misma hora, el conductor de un Volkswagen Golf se vio involucrado en otro incidente idéntico ocurrido en Orbellido en la carretera que va de Baíñas (Vimianzo) a A Pereira (Santa Comba). También precisó asistencia de los sanitarios del 061, aunque su estado no era grave.
De igual modo, la autopista AG-55 también fue escenario de otros dos siniestros. El primero entorno a las 09.00 horas debido a una colisión ocurrida cuando un vehículo rebasaba a otro que le precedía, a la altura del kilómetro 34 en dirección a A Coruña. El segundo tuvo lugar al filo del medidodía en el kilómetro 14,5 poco antes de la salida de Paiosaco. La automovilista afectada sufrió heridas de pronóstico reservado. Además, en ambos casos, se produjeron retenciones y retrasos en la circulación.
También en el concello de A Laracha, en torno a las 10.30 horas, otro turismo impactó contra un contenedor que el fuerte viento desplazó a la calzada de la AC-552. No hubo heridos.
En general, la mayor parte de la red viaria de la comarca presentaba ayer por la mañana problemas para circular debido a la hojarasca y los palos acumulados sobre el asfalto. De hecho, un repartidor de prensa que transitaba por la carretera de Caberta a Mintiráns, en Muxía, sobre las 06.30 horas, se topó con una rama que cayó sobre el parabrisas de su Toyota Versus recién estrenado. El vehículo, con solo dos semanas de uso, sufrió daños en la luna y un retrovisor, mientras que el trabajador y único ocupante salió ileso.
Además, en Muxía, concretamente en la Praia da Cruz, aterrizaron ayer por la mañana dos helicópteros particulares de Portugal. La Policía Local se interesó por el estado de sus ocupantes, entre los que había una persona indispuesta, que pudo continuar la ruta aérea sin mayores problemas.
En Camariñas, la falta de mantenimiento de la lonja provocó una gotera considerable en el interior del edificio. Los canalones no estaban limpios y el agua se coló por la placa hasta que cayó sobre la balanza empleada para pesar el pescado. No hubo daños importantes, aunque habrá que cambiar algunas placas del falso techo.