Vecinos de Cabana, Laxe y A Coruña inauguran las visitas nocturnas a Dombate
A CORUÑA CIUDAD
La novedosa iniciativa arrancó el viernes con un exhaustivo e ilustrativo recorrido que se prolongó más de una hora
06 jul 2014 . Actualizado a las 07:00 h.Mucho antes de convertirse en una parada obligada para los visitantes de la Costa da Morte y de que se pusiera en marcha el flamante programa de recorridos nocturnos, el dolmen de Dombate ya servía de escala para otros caminantes muy particulares: las jóvenes de Laxe y Serantes que en su recorrido a pie hacia populares romerías como la del Carmen do Briño -que se celebra cada 18 de julio- hacían un alto junto al megalito para cambiar el ajado calzado del camino por los zapatos de fiesta.
Con esta y otras muchas anécdotas el técnico cultural Ángel Eiroa aliñó las explicaciones que el viernes ofreció a los visitantes que inauguraron las visitas nocturnas al dolmen cabanés. Fue un grupo pequeño, pero variado -vecinos de Cabana y Laxe con niños y una pareja de A Coruña-. Y su deseo por disfrutar ya el primer día de esta novedosa oportunidad fue recompensado con un exhaustivo y revelador recorrido. Algunos de los participantes estaban ya a las diez de la noche en el centro arqueológico de Dombate, pese a que la visita estaba prevista para una hora más tarde.
La música de Enya a modo de ambientación, la oscuridad de la noche como telón de fondo omnipresente -gracias a la estructura diáfana del edificio que guarda el dolmen- y una pequeña linterna para seguir a través de la piedra las palabras y explicaciones de Eiroa fueron los elementos empleados para condensar los seis milenios de historia de la catedral del megalitismo gallego.
Frente al cuarto de hora o los veinte minutos que suelen durar las visitas guiadas diurnas -retomadas el 28 de junio pasado y que se prolongarán hasta el 30 de septiembre- el recorrido nocturno duró algo más de una hora y concluyó ya en el edificio de interpretación con una visita a la reproducción de la cámara del dolmen para observar de cerca las pinturas.
Eiroa repasó la cronología del monumento, de las excavaciones allí realizadas y del proceso que culminó con la construcción del edificio que lo guarda en la actualidad y explicó también algunas de las interpretaciones que ha suscitado la enigmática figura bautizada como «A Cousa» que se puede ver varias veces pintada en su interior y que, según el escritor Manuel Rivas podría ser una representación gráfica de la retranca.
Los versos que Pondal dedicó al dolmen cerraron este apasionante primer tour nocturno.