La manifestación más grande de la Costa da Morte en Madrid cumple veinte años

Santiago Garrido Rial
s. g. rial CARBALLO / LA VOZ

CARBALLO

INCLUYE ÁLBUM | Al menos un millar de personas protestaron por la gestión del Prestige

23 feb 2023 . Actualizado a las 12:29 h.

El 23-F es de esas fechas que se van quedando en la memoria colectiva de varias generaciones. Sobre todo por el intento del golpe de Estado, o también por la expropiación de Rumasa. Y, para los más jóvenes, por la manifestación en Madrid para protestar por la gestión del Prestige. Fue una de las mayores organizadas desde Galicia (aunque se unieron desde todas las Comunidades) en la capital de España, y desde luego la que movilizó a más personas de la Costa da Morte en esa ciudad. Pasó hace veinte años justos, un día como hoy, que coincidió en domingo.

Según los cálculos de aquel momento, en torno aun millar de personas se desplazaron a Madrid en autobuses (sobre todo) y en coches particulares. La mayor parte habían salido en la medianoche del sábado, y sobre las 7.30 de la mañana estaban estacionando por el centro. El lugar de convocatoria fue la plaza de Atocha y sus aledaños, de donde partiría la manifestación por el paseo del Prado hasta Cibeles, y desde ahí por Alcalá hasta la Puerta del Sol, donde terminó.

En la marcha estaban Touriño o Quintana, Beiras o Camilo Nogueira, además de Zapatero. Multitud de artistas, desde Luis Tosar a Tristán Ulloa, de Nacho Novo a Julián Hernández o Gonzalo de Castro. Escritores como Manuel Rivas. Políticos locales como Félix Porto o Manuel Antelo, que aún no eran alcaldes (de Muxía y Vimianzo), lo fueron y ya no lo son desde hace cuatro años. O Evencio Ferrero, al que le quedaban cuatro meses para serlo, y sigue en el cargo. Entidades sociales, agrupaciones culturales, vecinos anónimos que quisieron sumarse a las protestas... Y un activo y muy aplaudido Coque Toba, de Muxía, disfrazado de Quijote y a caballo, luchando contra molinos invisibles.