El club rojiblanco se decanta por el jugador madrileño por su «proyección»
04 jul 2015 . Actualizado a las 17:20 h.Antonio Campillo Medina (Madrid, 1990) vestirá la elástica rojiblanca la próxima temporada. El club hacía ayer oficial la incorporación del centrocampista procedente del filial del Rayo Vallecano. El jugador firma un contrato que lo vinculará al equipo de las murallas las dos próximas temporadas, dejando la puerta abierta a una tercera.
Formado en las categorías inferiores del Atlético de Madrid, militó en el Getafe antes de acabar recalando en el filial del Rayo Vallecano, en el que llevaba dos temporadas. Desde el club anuncian que su apuesta por el madrileño vino determinada «por su juventud y su proyección».
El perfil
La versatilidad como virtud. Campillo militó con el segundo equipo del Rayo en la Segunda División B, en el grupo dos. A pesar de su posición de centrocampista, marcó un total de 12 goles en el campeonato liguero y su buen rendimiento hizo que la pasada temporada entrenase de forma habitual con el primer equipo rayista. En el filial del Rayo fue titular indiscutible a lo largo de la pasada temporada. Disputó los 38 partidos de la categoría, todos como titular y demostró una gran versatilidad, ocupando las posiciones de mediocentro ofensivo, mediapunta, delantero centro y extremo derecho. Esas cualidades hicieron que, en total, estuviese sobre el terreno de juego 3.382 minutos durante la campaña 2014-2015. con la camiseta rayista Apenas se perdió 35 minutos.
Su encaje
Un proyecto que apuesta por la cantera y la juventud. El madrileño llega al Lugo para cumplir con el proyecto de Tino Saqués, el nuevo presidente del Lugo, y su voluntad de apostar por la gente joven. Con esa intención llegó también al club Toni Otero, el director deportivo del conjunto rojiblanco tenía claro que quería apostar por jugadores jóvenes y con proyección, arropados por los veteranos.
El club anunció en días pasados la renovación de algunos de los pilares del Lugo, es el caso de Carlos Pita, Fernando Seoane o Manu, el capitán del grupo lucense. Serán ellos los que mejor puedan orientar a los más jóvenes en la dinámica del juego lucense.
Carencias en la zaga
El club todavía necesita reforzarse atrás. A pesar de que poco a poco el Lugo va perfilando su plantilla, el club sigue necesitando reforzar algunas de sus posiciones. En el caso de la zaga rojiblanca, Luis Milla de momento solo cuenta con Israel Puerto, que llegó mediada la temporada pasada como refuerzo y Jon García, que se recupera todavía de una lesión de rodilla. Tampoco la portería parece cerrada del todo. Con la marcha de Dani Mallo y la rescisión de contrato de Jon Ander Serantes -cedido la temporada pasada al Leganés- al club le haría falta otro guardameta. Estos días se especuló con la posible llegada de Roberto Fernández, el chantadino que protegió la temporada pasada la meta del Granada (Primera División) y que cumpliría el perfil que busca Toni Otero, un portero con experiencia.
El futbolista estuvo a las órdenes de Paco Jémez, que fue central rojiblanco el 2006
Antonio Campillo, que a partir del próximo lunes se pondrá a las órdenes de Luis Milla en el Lugo, entrenó la pasada temporada bajo la batuta de Paco Jémez. El míster canario llegó al banquillo del primer equipo del Rayo Vallecano en la temporada 2011-2012 y este año consiguió situar al equipo madrileño en decimoquinta posición de la tabla de la Primera División.
Antes de iniciar su carrera como entrenador, Paco Jémez desarrolló su carrera como futbolista con una hoja de servicios impresionante: fue internacional absoluto en 21 ocasiones, destacando su actuación en la Eurocopa del 2000. En Primera División su palmarés incluye una Copa del Rey y una Supercopa de España con el Deportivo de La Coruña. En el ocaso de su carrera deportiva, Jémez recaló en el Lugo. Fue en la temporada del 2006.
El central no fue uno de los fichajes más rentables del Lugo, a pesar de su prolífica trayectoria profesional, se retiró nada más terminar la pretemporada y sin disputar un solo partido de Liga colgó las botas.
Durante su estancia en el Lugo, Jémez coincidió con otro de los fichajes estrella del club rojiblanco, Ángel Cuellar, que participó en el ascenso del club a la Segunda B y también fue internacional absoluto en dos ocasiones.
Sin minutos en la competición
A pesar de que Campillo no disfrutó de minutos con el primer equipo en la competición regular, si que entrenó durante buena parte de la temporada con jugadores de la primera categoría del fútbol nacional. Un aspecto que seguro consideró el director deportivo del Lugo a la hora de fichar a este jugador, de apenas 25 años.