Aprovechando el parón de la Liga inglesa, visitó esta mañana a sus excompañeros del Celta
07 sep 2013 . Actualizado a las 04:14 h.Iago Aspas, el hijo pródigo, regresó a casa. Esta mañana, aprovechando el parón de la liga inglesa, se presentó en las instalaciones deportivas del Celta, en A Madroa, para saludar a sus excompañeros y firmar autógrafos a los numerosos fans que lo esperaban. El delantero reconoció que «se me hizo raro entrar en el vestuario, iba directamente a mi sitio». El futbolista del Liverpool, que saludó a pie de campo a Luis Enrique y a la plantilla, sigue fielmente al Celta y considera que «las sensaciones son muy buenas». Cree que este año el equipo logrará una salvación más holgada.
Aspas, que regresaba a Moaña por primera vez desde que inició la temporada en Inglaterra, señaló que «se echa de menos estar dos meses y medio sin ir por casa, pero allí me están yendo bien las cosas». Afirma que «estoy muy contento», disfrutando del liderato y adaptándose a su nueva posición. El gol todavía no ha llegado tras tres jornadas, aunque no tiene presión añadida.