El futbolista podría ser infiltrado para participar en el partido ante el Atlético
07 mar 2014 . Actualizado a las 21:26 h.Rafinha Alcántara no solo no entrenó en la última sesión de la semana del Celta, sino que incluso apareció con más dolor y con un gran edema, lo que ha puesto en alerta a los médicos, que han decidido someterlo a una resonancia en la tarde de este viernes en la que se ha descartado la existencia de una fisura, pero en las pruebas se ha detectado «un importante edema en las partes blandas alrededor del primer dedo del pie izquierdo».
Por tanto, los servicios médicos del Celta esperarán a mañana para comprobar la evolución del jugador y decidir si es posible realizarle una infiltración que le permita estar a disposición de Luis Enrique para el choque de este sábado contra el Atlético de Madrid.
Rafinha, indiscutible para el técnico asturiano, cayó lesionado en el entrenamiento del pasado jueves.