El técnico probó con tres centrales y con Augusto y Krohn-Dehli en el medio
22 ene 2015 . Actualizado a las 15:58 h.El Celta vivió ayer su segundo entrenamiento de la semana y el primero a puerta abierta antes de la visita a Getafe. En una mañana gélida y desapacible, el equipo de Eduardo Berizzo trabajó durante hora y media en una sesión que comenzó con el habitual trabajo físico a las órdenes del Profe Fernández en el campo de hierba sintético -Charles no realizó todo el plan, lo mismo que Krohn-Dehli- y que continuó en el césped principal con el equipo dividido por demarcaciones.
Tras una serie de rondos en los que sobresalieron el buen ambiente y las risas, Eduardo Berizzo tomó las riendas del entrenamiento dividiendo a sus jugadores en dos grupos. Como si partiese el equipo por la mitad, él se encargó de trabajar con los defensas y los mediocentros, y sus ayudantes se responsabilizaron del trabajo de la gente de ataque.
La defensa con tres centrales y dos carrileros que se arma con un doble pivote por delante parece estar cobrando más protagonismo en los planes del técnico argentino, que ayer entrenó ese sistema con sus jugadores. Carles Planas como lateral zurdo, Jonny en el costado derecho y Sergi Gómez, Cabral y Radoja como centrales, construyeron una defensa que bien podría ser la titular ante el Getafe, puesto que aunque en una segunda probatura Fontás -sancionado-, David Costas -que puede salir cedido en este mes- y Samu entraban en acción, su participación en Madrid está casi descartada.
Entre las variantes defensivas que los celestes trabajaron para cuando no tengan el balón, estuvo el movimiento de Sergi Gómez, Cabral o Radoja adelantándose para frenar al punta rival como una de las soluciones para detener al Getafe.
Doble pivote
Berizzo trabajó especialmente con sus jugadores los movimientos defensivos, aunque también incidió en cuál debe ser la respuesta celeste cuando dispongan de la pelota. En esa parcela, el técnico reclamó a sus jugadores que impriman velocidad a la circulación de balón. Conectar con los laterales para sacar el esférico es una de las variantes que el equipo maneja en un esquema en el que el Celta recupera el doble pivote. Ayer Krohn-Dehli y Augusto Fernández -por momentos, Borja Fernández- formaron pareja en el centro del campo como ya hicieron en la primera parte del partido frente al Valencia. Esos 45 minutos parecen ser una vía que Berizzo contempla como camino para sacar de la crisis a un equipo que quiere apuntalar su juego a partir de los cimientos defensivos.