La familia pide que lo devuelvan porque les resulta inasumible comprar otro
13 ene 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Apenas bastaron un par de minutos para darle el primer gran disgusto del año a la familia de Santiago Enjamio: les habían robado el carrito de los dos gemelos a las puertas de casa. El pasado domingo, sobre las siete de la tarde, se disponían a aparcar en la barrio de los Mallos, donde residen, y como no había sitio cerca de su vivienda, estacionaron un momento en doble fila para bajar todos los bártulos de los pequeños.
«Mi mujer y los niños estaban esperando dentro del coche mientras yo bajaba la silla. En ese momento, dejaron un sitio libre en la calle, y cogí el coche y fui a aparcarlo. Cuando volví me habían robado el carro de los gemelos», recordaba ayer Santiago Enjamio, que quiere pensar que «la persona que se lo llevó no lo hizo con mala intención, ni con ánimo de hacer mal». Sin embargo, les ha causado un gran problema, ya que esta familia no contaba con este gasto extra a principios de año.
«Los dos trabajamos, pero tenemos tres hijos, y en este momento el dinero que tenemos ahorrado es para pagar los pañales y la leche de los niños», apuntó. Aunque tanto el carrito como los sacos de los niños que tenía fueron un regalo, Enjamio calcula que todo podría rondar los 500 euros, una cantidad de la que no disponen ahora mismo.
Pero su intención no es que alguien se lo compre, sino que «la persona que se lo llevó, lo devuelva, o si lo intenta vender, que la gente que se lo quiere comprar sepa de dónde lo sacó. En A Coruña no creo que desaparecieran muchas sillas gemelares el domingo a las siete de la tarde». Santiago Enjamio tiene esperanzas y confía en recuperar el carrito para poder transportar a sus hijos de 1 año, que estos días han tenido que ir en brazos a todos los sitios.
Aunque la guardería les queda más o menos cerca, «mi mujer no sabe conducir, y era ella la que usaba la silla para poder llevar a los niños. De momento no hemos tenido ninguna urgencia, pero queremos recuperarla cuanto antes», solicitó, al mismo tiempo en que insistió en que no quiere que nadie se la regale.
De hecho, no han efectuado ninguna denuncia, porque no quieren comprometer a ninguna persona, y solamente esperan que la silla aparezca en los próximos días. Por eso, no paran de repetir: «Por favor, que nos la devuelvan».