12 jul 2012 . Actualizado a las 07:00 h.
Yonier no llevaba documentación cuando lo apuñalaron. Pero sí su móvil, que utilizó la policía para llamar a uno de sus contactos. Fue una mujer, que avisó a una prima de la víctima y esta a su primo, Carlos Arenas, que vivía en el mismo piso con Yonier y con otra pareja. «Teníamos que ir a hacer una prueba al Hospital Abente y Lago. Y nos acostamos sobre las once», contó Carlos. Pero escuchó como, al rato, llegó a la casa una mujer: «Y estuvo hasta las doce con él, en su habitación». Después el joven colombiano y la chica bajaron: «No sé por qué, seguro que lo llamaron y eran sus asesinos, que lo estaban esperando». Carlos aseguró que su primo no tenía enemigos. A él «lo mataron las enaguas», sentenció.