Los facultativos trabajaron con un grupo electrógeno y sin teléfono
09 oct 2012 . Actualizado a las 07:05 h.El centro de salud de Novo Mesoiro fue el último objetivo de los que se han empeñado en dejar la ciudad y parte de la comarca sin cobre y sin alumbrado. El saqueo de 130 metros de cable se produjo el pasado fin de semana -se desconoce el día-, pero fue descubierto a primera hora de la mañana de ayer cuando los facultativos comprobaron que no había luz en el edificio. Según informó el Sergas, desde el momento en el que se produjo el robo, se activó el grupo electrógeno del que dispone el edificio, pero este sistema se quedó sin combustible durante las horas desde que estuvo funcionando hasta que abrió las puertas el lunes, por lo que hubo que dotarlo de más gasoil. Un proceso que no impidió el normal funcionamiento del centro.
Aun así, hubo bastantes contratiempos para los profesionales que trabajan en el centro de salud. El edificio estuvo prácticamente toda la mañana sin línea de teléfono fija, las llamadas debían hacerlas a través del móvil. Tampoco funcionaban las impresoras ni los enchufes del vestíbulo y los ordenadores trabajaban «bajo mínimos». Mientras tanto, operarios de una empresa de electricidad trabajaron durante toda la mañana para restablecer la normalidad.
Lo cierto es que los ladrones tampoco lo tuvieron muy difícil para realizar el robo, ya que el cable estaba a la vista, al pie de un camino de asfalto al que tampoco era muy difícil acceder. Tan solo estaba separado por una barandilla de medio metro, sencilla de sortear. No fue difícil para los amigos del cobre ajeno porque, esta vez, el cableado no estaba bajo el cemento.