Atrapado en las redes de la SGAE

Javier Becerra
Javier Becerra A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

PACO RODRÍGUEZ

La cadena Café Hispano, que dejó de pagar a la entidad tras negarle esta la resolución de su contrato, ha sido condenada a abonar 1.622 euros

07 ene 2014 . Actualizado a las 15:00 h.

Bernard Parente no quiere que la SGAE ni otras entidades gestoras de derechos de autor saquen ni un solo euro más de su caja registradora. Lo deja claro en la entrada de cualquier de los establecimientos de Café Hispano, la cadena de la que es socio. En todas luce el mismo cartel: «Este establecimiento renuncia al uso y disfrute de todas y cada una de las obras audiovisuales y musicales gestionadas por SGAE, AIE, Agedi y Egeda». Abajo declara que en sus locales solamente se pone música cuya licencia le eximen del pago de esos derechos.

Es su particular modo de poner la venda antes de la herida. Otra herida más, en este caso. «Con la SGAE tú eres culpable hasta que demuestren que eres inocente», asegura. Y recurre la sentencia dictada contra su sociedad en octubre del 2013. Le condena a pagar 1.622,42 euros por haber dejado de abonar la cuota de autores. «Eran unos 20 euros al mes y yo no usaba sus canciones. Pedí a la SGAE romper un contrato que firmé porque me había amedrentado antes y se negaron. Mi postura fue dejar de pagarles». Ante el Juzgado de lo Mercantil número 2 defendió lo que rezan ahora sus carteles. Pero no le dieron la razón.

La sentencia reconoce ese intento de cancelación del contrato. Sin embargo, también explica que una de las cláusulas del mismo señala que para hacer efectiva esa ruptura es necesario retirar los aparatos de reproducción del establecimiento. «Es decir, me obligan a quitar mi equipo de música aunque yo no ponga canciones de su repertorio», explica Parente. Los televisiones y los reproductores de música permanecen. Por tanto, el contrato continúa vigente.

Él asegura que desde hace años rastrea la Red en busca de música libre de derechos, con licencias copyleft y similares: «Es la única que uso», dice tajante. Pero el juez estimó en la mentada sentencia que su afirmación «carece de suficiente sustento probatorio». Sí se lo da a unas visitas de las sociedades de gestión. También a dos actas de julio en las que identifican programas televisivos en emisión y obras protegidas. Parente sostiene que se percató de alguna visita: «Van con el móvil y utilizan el Shazam [una aplicación que permite identificar canciones]. También te piden que cambies el canal [sostiene que solo emite deportes e informativos] para hacerle una foto. Luego, piden un tique para demostrar que fueron y se van».

«Un despropósito»

De todos modos, el hostelero niega todos esos supuestos y asegura que la situación en la que se encuentran su gremio al respecto es «un despropósito». Parente dice que la SGAE «va de que ellos gestionan el 100 % de la música mundial, cuando no es así». En base a ello, señala que «te meten tanta presión que, al final, cedes y pagas».

Al respecto indica cómo empezó su relación con la entidad: «No pagábamos de inicio y nos exigían unos 9.000 euros. Nos ofrecieron condonar la deuda con el alta». Ahora espera pasar página sin volver a pagar más. Habrá que ver si lo logra. El contrato todavía no se ha roto. Y la música sigue sonando.