Los hosteleros tendrán hasta el 31 de mayo para solicitar los permisos para las terrazas
PONTEVEDRA CIUDAD
El plazo para adecuarse a la nueva ordenanza de terrazas vuelve a ampliarse, ahora hasta el 31 de mayo. Después de ese momento, «hay una normativa y habrá que cumplirla», dijo ayer la concejala de Movilidad, Begoña Freire.
La ampliación del plazo no llega sola. La edila la anunció también que se pondrá en marcha de modo inmediato una campaña informativa que pasará local por local explicando a sus propietarios en qué consiste esa nueva norma y cómo ha de solicitarse la regularización de los espacios.
Los locales deberán adecuar sus instalaciones adaptándolas a un texto que quiere lograr una mejor integración estética de esos espacios con el entorno. La edila apuntó que ya hay unas 300 solicitudes presentadas, y recordó que en la ciudad son casi mil locales los que cumplen con los requisitos para solicitar la ocupación de la acera por mesas y sillas.
La norma permite esas instalaciones en anchos menores a lo que estaba regulado anteriormente. Así, un paso peatonal de 2,30 metros -antes eran tres metros- basta para que el propietario pueda solicitar la instalación.
Además, durante este y el próximo año habrá una bonificación del 50 % de la tasa para todos aquellos que reúnan unos determinados requisitos y pidan esa rebaja en el momento de presentar la solicitud. Se aplicará a las que no tengan cerramiento estable y ofrezcan una mejora estética o con elementos ajardinados, entre otras cosas. «Es un espacio que los coruñeses ceden a los hosteleros», recordó la concejala sobre el suelo público en el que se despliegan las terrazas de bares y cafeterías.
«Lo importante es que el hostelero conozca la ordenanza, el plazo ya se ha ampliado suficientemente», recordó Freire, quien apuntó que con la bonificación prevista la tasa queda en 12,5 euros por metro cuadrado al año -el doble sin la rebaja-, una cifra muy inferior, dijo, a los 106 euros por metro que se pagan en Pontevedra y a los 41 euros que pide el Ayuntamiento de Ferrol. La cuantía -sin descuentos- es similar a la que se cobra en Santiago.
«Entre todos debemos mejorar el aspecto estético de nuestras terrazas, su integración en el paisaje urbano y su entorno, creando un impacto positivo», apuntó la edila.