
Los obreros comenzaron ayer a trabajar en la confluencia de la calle Ramón Cabanillas con la avenida de Arteixo, en donde se construirá un ascensor para facilitar el tránsito. Las dos vías estaban hasta ahora unidas por unas escaleras, lo que planteaba dificultades de accesibilidad a los vecinos que el Ayuntamiento pretende corregir con la obra.
El inicio de los trabajos contó con la presencia del concejal de Infraestructuras, Martín Fernández Prado, que explicó que la construcción del ascensor requerirá una inversión de 143.264 euros y debería estar finalizada en un plazo de cuatro meses.
Fernández Prado señaló que el ascensor facilitará la accesibilidad hacia los Mallos y la zona de la Sagrada Familia, además de entre las dos calles comunicadas directamente por él. Además de implantar la máquina, se harán algunas mejoras para visibilizar las escaleras y urbanizar la calle, de acuerdo con el proyecto que fue elegido en un concurso de ideas celebrado con esa finalidad.
El edil de Infraestructuras recordó que la instalación del elevador está incluida en el Plan de Accesibilidad del Ayuntamiento, que pretende mejorar el tránsito peatonal en cuatro puntos de la ciudad además del ya citado: Marques de Cerralbo, Magistrado Manuel Artime con Cabo Santiago Gómez, Maestro Clavé y Capitán Troncoso con General Alesón. Parte de esos proyectos ya se están tramitando y las obras comenzarán en los próximos meses.