Marea y PSOE sacarán adelante unas cuentas efímeras con las que nadie se identifica, pero que tampoco suscitan rechazo
20 may 2016 . Actualizado a las 10:49 h.A las 10 de la mañana del lunes terminará el culebrón de los presupuestos. A esa hora arrancará el pleno extraordinario en el que se aprobarán las cuentas con más de cinco meses de retraso, tras una complicada gestación que ha enfrentado a los partidos políticos y puesto al borde del colapso a las entidades sociales, culturales y deportivas de la ciudad, asfixiadas por la imposibilidad de cobrar los convenios municipales.
El presupuesto no solo llega tarde, es que además su esperanza de vida es muy limitada. Solo estará vigente siete meses si la gestación de su sucesor es menos conflictiva y se aprueba, como fue norma durante los últimos 30 años, a tiempo de entrar en vigor a 1 de enero del 2017.
Pero además de ser impuntual y efímero, el presupuesto de este año también es huérfano. Todos los partidos políticos han puesto su particular semillita para engendrarlo, pero al contrario que Darth Vader ninguno insiste en ser su padre, y su llegada al mundo no les produce demasiada emoción, más bien ni fu ni fa.
La concejala de Facenda, María Eugenia Vieito, señaló que las cuentas «non son as que desexaba o goberno local». La portavoz del PP, Rosa Gallego, fue menos comprensiva con la criatura: «Recorta las inversiones en un 30 %, aumenta el gasto corriente, no crea empleo y está elaborado sin contar con los ciudadanos y las asociaciones». La portavoz del BNG no pudo participar en la comisión que ayer por la mañana confirmó que el lunes se produciría el alumbramiento, pero desde la aprobación inicial no ha dejado de mostrar su desazón por los problemas técnicos del texto y por la desaparición de algunas de las aportaciones que había hecho su grupo. Quizá el partido más satisfecho sea el PSOE, que ha destacado que el documento es fruto, o hijo, del «consenso» y que todas las fuerzas han hecho concesiones para traerlo al mundo. Quizá por eso nadie lo reconozca como propio.
Los proyectos sociales
Pero también hay notas de optimismo. María Eugenia Vieito señaló que las cuentas permitirán al gobierno local desarrollar sus proyectos sociales. Incluye más de dos millones de euros para la renta social municipal un proyecto prometido para los primeros cien días que sigue sin aplicarse. Pero la concejala también lamentó que PP y PSOE redujesen las partidas del área de Participación: «Non conseguimos recuperalas, pero eles serán os que terán que explicar por que non queren que a cidadanía participe».
Incluso el PP vio notas positivas. Gallego insistió en que se garantizaron los convenios con las entidades sociales, que estarán dotados con los mismos importes que en el 2014, y destacó que aceptaron restituir parte del dinero al IMCE para que las fiestas de verano mantengan los «conciertos gratuitos y de calidad».
La portavoz conservadora recordó que la oposición ha logrado además «reducir el despilfarro en externalizaciones y publicidad», y acusó al gobierno de negarse a negociar hasta el último momento, cuando se vio «forzado» por el informe de intervención y las advertencias del secretario al principio de la comisión del miércoles, en la que se desatascó la aprobación del texto.
Por su parte, el concejal socialista José Manuel García, ha destacado que se mantienen numerosos proyectos de su partido, como el distrito universitario de los Mallos, las obras en mercados municipales, la Ciudad de la Música (que incrementa los fondos para la temporada lírica) y otros.
Así las cosas, si se mantienen las votaciones de la comisión de ayer, el presupuesto de 244,5 millones (7,5 menos que el del 2015) de los que 31,2 se dedicarán a inversión, saldrá adelante con la abstención del PP y el voto a favor de Marea y PSOE. Padres, todos ellos, poco entusiastas.
Cinco meses de espera para llegar a un acuerdo en poco menos de cinco horas
Apretados por los plazos legales y supervisados por los técnicos municipales, los partidos alcanzaron un acuerdo para cerrar el presupuesto en las poco menos de cinco horas que duraron las comisiones del miércoles y ayer. En la primera, de cuatro horas, se cerraron las líneas maestras del dictamen que se llevará a pleno el lunes y que fue ratificado mediante las votaciones, una por una, de las alegaciones presentadas por partidos, particulares, asociaciones y empresas. En ese encuentro el gobierno hizo un último intento de restituir otros 150.000 euros para el IMCE, el organismo que organiza los espectáculos culturales. El intento no prosperó al ser desaconsejado por los técnicos de la oficina presupuestaria, que advirtieron que obligaría a rehacer la cuenta del IMCE. Los fondos, si son precisos, requerirán un futuro cambio en el texto.