La Asociación Amigos del Parque reivindicó el popular recinto con actos culturales y un pícnic multitudinario
02 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Parque de El Pasatiempo de Betanzos se acercó ayer más que nunca a lo que todos esperan de él: un lugar de encuentro, ocio y celebración. Queda mucho (realmente todo) para su recuperación integral, pero este mágico espacio diseñado hace un siglo como capricho de un indiano recibió ayer un gran impulso de aliento humano. La Asociación de Amigos do Parque do Pasatempo le preparó al recinto una jornada homenaje con múltiples actividades, así que allí se juntaron pintores, fotógrafos, músicos... que tomaron el parque como punto de inspiración.
E incluso un pícnic que llegó a reunir a más de cincuenta comensales, que reclamaban con su perenne presencia una vida mejor para el parque por el que tanto llevan luchando. «La respuesta de la gente ha sido extraordinaria, hemos contado con gente de la Escuela de Restauración de Pontevedra y de la de Diseño Gráfico de Lugo, gente de todas las procedencias de Galicia», relataba José Souto, arquitecto y responsable del popular blog del parque. En el centro del estanque se reunieron varios alumnos del Centro Internacional de Estampa Contemporánea, como Antón Taboada, compostelano afincado en Betanzos durante los últimos meses, y en cuyo cuaderno se reflejaban partes de El Pasatiempo en forma de preciosas acuarelas. «Me pareció una buena iniciativa y aquí estoy, no consigo entender cómo no se implica aún más gente en la recuperación de este sitio único, da rabia verlo así», señaló.
Durante todo el día El Pasatiempo recibió a un alto porcentaje de los cientos de visitantes que aprovecharon la jornada festiva para visitar la feria de Betanzos.