Lo primero que quisiera expresar es mi pésame a las familias y amigos de los fallecidos y heridos en el rali de A Coruña. Ha sido un suceso horrible, absolutamente terrible, y que yo recuerde es la mayor tragedia en un rali. Al menos no tengo memoria de un accidente con tantas víctimas mortales ni en el Campeonato Mundial ni en el de España. Como es obvio, también me afecta especialmente por haberse producido en Galicia, y ante todo quisiera apuntar que por mucho que ahora debatamos sobre las medidas de seguridad o incluso en un futuro se lleguen a modificar o incrementar, no habrá ya consuelo posible para quienes han perdido a los suyos en Carral.
Respecto a la cuestión concreta que todos tenemos estos días en mente, es decir, si las medidas de seguridad son suficientes para proteger a los pilotos, organización y espectadores en los ralis, lo primero que quiero señalar es que desconozco el protocolo específico que aplica la Federación Gallega, que a este nivel tiene independencia para gestionar su campeonato, pero lo que sí puedo decir, porque lo he vivido en primera línea, es que los protocolos que se siguen tanto en el Campeonato de España como en el Mundial de ralis son muy completos y garantizan la seguridad de todos los que participamos en las carreras, más allá de que siempre se trata de un deporte de riesgo en el que los accidentes no son del todo evitables.
Por supuesto, siempre se puede reforzar la seguridad, y todas las revisiones y nuevas medidas que se puedan implantar siempre son bienvenidas. La inversión en seguridad siempre se puede incrementar y mejorar, y en todo momento hay que estar dispuesto a ello.
Tal vez un aspecto en el que se podría incidir es en la anulación de los tramos de un rali cuando se detectan algunos problemas de comportamiento en los espectadores. Cuando el jefe de seguridad de la carrera hace el recorrido previo a la competición y observa, por ejemplo, que el público permanece en una zona que debería estar despejada, no debe dudar en requerir al director de la carrera para que anule ese tramo. Ante todo, la seguridad.
También quisiera subrayar que desde los tiempos en que yo competía con Carlos Sainz a la actualidad se ha mejorado muchísimo en esta materia y el papel de Arturo Fernández de la Puente como responsable de seguridad de la Federación Española de Automovilismo es sobresaliente y me consta que no deja de mejorar todos aquellos aspectos que puedan corregirse.
La seguridad de toda la familia de los ralis, espectadores, pilotos, voluntarios, etcétera, debe ser la gran prioridad de todos, para que podamos disfrutar de la competición sin riesgos.
El autor es excopiloto y campeón del mundo de ralis