El Polideportivo Ejido presentó ayer a Fernando Castro Santos como nuevo entrenador. El pontevedrés abre su segunda etapa en el club, al que dirigió en la temporada 2001-2002. El ex técnico del Compostela, el Celta y el Sevilla, entre otros, se comprometió hasta el verano y, si logra la permanencia, también la próxima campaña. Llega acompañado por el preparador físico compostelano José Andrés Rodríguez.
Castro Santos sustituye al también gallego Luis César, destituido el pasado lunes debido a los malos resultados del equipo almeriense, antepenúltimo clasificado de la Segunda División. El gallego evitó cualquier referencia al entrenador destituido, aunque reconoció que cambiará algunos aspectos del juego de su equipo. Eso sí, hizo hincapié en que «nada de lo que yo pueda decir debe tomarse como una crítica, por favor, porque soy muy respetuoso con el trabajo de cada uno».
A punto de cumplir 55 años, el pontevedrés regresa a los banquillos tras su experiencia de la pasada campaña en el Vecindario. «Esta era una asignatura pendiente de mi otra etapa, en la que me marché al no llegar a un acuerdo y buscando otros horizontes, pero me equivoqué. Fue la mejor etapa de mi vida profesional, junto con la del Compostela», señaló.
El entrenador gallego desechó que llegue a El Ejido como el salvador del club. «Soy un profesional que quiere solventar una situación. Sin la implicación de todos, mi trabajo no vale de nada», declaró, al tiempo que pidió el apoyo de la afición: «Vengo a recuperar las almas celestes que yo vi en aquella otra etapa. Estoy seguro de que vamos a llevar a más gente al campo y todo eso hay que hacerlo demostrando que trabajamos al tope de nuestras fuerzas por el bien del equipo y del club. Y eso lo puedo garantizar que lo conseguiré de los jugadores. El acierto no lo puedo garantizar, pero esto sí».
Castro Santos debutará el sábado en su estadio frente al Sporting, tercer clasificado de la categoría. Una de las estrellas del cuadro gijonés es el hijo del técnico gallego, Diego Castro.