La plantilla del Celta lamenta la incomodidad de la suspensión en Cartagena por lo apretado del calendario
DEPORTES
«Tener que volver será un contratiempo», dice el centrocampista Toni
09 abr 2012 . Actualizado a las 11:15 h.El portero del Celta Sergio Álvarez afirmó que la suspensión del partido frente al Cartagena no les vino «nada bien, porque ahora se acumulan los partidos» y tendrán que «hacer un viaje largo de nuevo». El meta, que en Cartaganova repitió en el once a pesar de que su compañero Yoel Rodríguez ya está recuperado de la lesión muscular que sufrió hace unos meses, ha reconocido que jugar sin la afición rival puede beneficiar al Celta.
«El Cartagena se jugaba mucho en el partido de ayer y su afición respondió. Durante todo el partido estuvo animando a su equipo. Ahora es probable que haya un partido diferente si como se dice el partido se juega a puerta cerrada. Cuando nos toque, hay que ir allí a ganar», afirmó.
En la misma línea se pronunció su compañero Toni. El centrocampista también ha lamentado la suspensión del encuentro porque va a suponer «un contratiempo» para su equipo por la acumulación de partidos en el momento decisivo de la temporada. «Tener que volver a Cartagena será un contratiempo porque el calendario ya está muy comprimido. Nuestra idea era jugar y ganar para sumar tres puntos más, pero durante la primera parte el árbitro ya había avisado que suspendería el partido si continuaban los incidentes», dijo a EFE el extremo celeste.
Con 31 minutos por delante, y en función de la redacción del acta arbitral, todo apunta a que el partido se reanudará presumiblemente a puerta cerrada en un día todavía por determinar. Así sucedió en el Granada - Mallorca, el último precedente de una suspensión en Primera División. Se jugó en Los Cármenes sin público y con el equipo local asumiendo las costas del viaje.
Paco Herrera denunció lo apretado del calendario que le espera al Celta en el mes de mayo (con seis jornadas programadas de Segunda) y los problemas que tiene el Celta para viajar desde una punta del mapa. Como le sucediera en Murcia, tendrá que viajar dos veces a más de mil kilómetros de distancia de Vigo. Lo más lógico sería aprovechar la salida que dentro de quince días el Celta tiene que cursar al Hércules en Alicante para disputar la media hora que queda pendiente, ya que se trata de dos localidades relativamente próximas, aunque la última decisión le va a corresponder al Comité de Competición.