El cántabro descarta que le perjudique el 4-4-2 para ser titular
22 ago 2012 . Actualizado a las 11:37 h.Mario Bermejo (Santander, 1978) comenzó su segundo año como céltico en el banquillo. Quizás en el nuevo sistema pueda ser uno de los sacrificados, pero el delantero no cejará en su empeño de ayudar a un equipo que desde su prisma ya demostró en el estreno que tiene nivel para competir en Primera.
-¿Qué análisis hace del arranque de la Liga?
-Bien por el partido realizado y mal por el resultado, más viendo la cantidad de ocasiones que tuvimos para poner el resultado a nuestro favor, pero es lo que tiene la categoría, que juegas buenos partidos, tienes muchas ocasiones y te enchufan una, la pena es que fue la menos clara de ellos. Tenemos que aprender de esas cosas.
-¿Solo faltó definición?
-Hicimos bastante bien las cosas, aunque siempre se puede mejorar. La tónica general del partido fue buena, con dos partes diferentes. En la primera estuvimos bastante bien, tranquilos, en la zona defensiva, controlando bien la situación. La segunda fue más de ida y vuelta, en donde a nivel de ocasiones salimos ganando pero a nivel de definición pues no.
-¿Le sorprendió su suplencia?
-No me sorprende ni me deja de sorprender, son situaciones que se dan a lo largo de la temporada y el año pasado se dieron. Este la competencia es difícil, la forma de jugar que el otro día utilizó el equipo quizás es más complicada para que yo pueda estar en ese once, pero seguiré trabajando para ganar la confianza del entrenador y aportar cuando me toque.
-¿El 4-4-2 juega en contra para su titularidad?
-Ni en contra ni a favor, depende que 4-4-2, he venido jugando con ese sistema durante mucho tiempo de mi carrera y he jugado siempre, pero este 4-4-2 es diferente porque el míster quiere gente con velocidad, gente en la mediapunta que se mueva mucho con la pelota y ahí igual no cuadro, de momento, pero yo sigo en mi empeño de buscarme un sitio en el equipo, de ayudar cuando me toque y no desfallecer porque esto es muy largo y la temporada requiere que todos estemos mentalizados de que nos puede tocar en cualquier momento.
-Podría jugar como nueve.
-El año pasado cuando comenzamos, en las dos primeras jornadas jugamos así, y jugué los dos partidos hasta la desgracia de la lesión en Huelva de la clavícula. Veníamos jugando así. Pero es el míster el que decide que es lo que quiere en cada posición, que tipo de futbolista quiere en esas posiciones, y el sábado no quería un jugador de mis características sino otro distinto. No hay que tener ninguna bajada en cuanto a la mentalidad, la confianza, sigo entrenando y participando como siempre, y no cabe más que seguir trabajado para ayudar al equipo, a los compañeros cuando toque y ganar la confianza cuando corresponda.
-¿Cómo valora el acceso a la capitanía?
-Es anecdótico, no le doy importancia porque creo que mi ayuda fuera del vestuario con independencia de que sea o no capitán va a ser siempre la misma, pero en este caso entran otros detalles en cuanto a temas de vestuario pero agradezco la confianza de mis compañeros.
-¿Es un reconocimiento a sus galones dentro del equipo?
-Quizás por la veteranía, por el carácter, por la forma de ser, pero ayudaré de la manera que pueda al equipo.
-¿La exigencia comienza en el partido ante la Real?
-Ahora cogemos a un equipo que viene de una derrota dolorosa y seguro que vendrán con ganas de quitar esa sensación mala del primer partido, además jugando en casa, pero nosotros no tenemos nada que temer, pero si respetar a un equipo de mucha calidad.